En libertad el último detenido del caso 'Gürtel', un empleado de Correa
- Tras más de tres horas de interrogatorio, el magistrado ha decidido dejarle libre
- Deberá comparecer ante la justicia cada semana y no podrá salir de España
- Es la cuarta persona liberada con medidas cautelares en esta investigación
El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha dejado en libertad con la obligación de comparecer una vez a la semana en el juzgado más próximo a su domicilio a un trabajador al servicio de Francisco Correa, el presunto cabecilla de la trama de corrupción y tráfico de influencias desmantelada con la Operación Gürtel, tras interrogarle durante más de tres horas, según fuentes de su defensa.
El empleado de Correa, que fue detenido por la Unidad de Delitos Económicos y Financieros (UDEF) del Cuerpo Nacional de Policía y cuya identidad no ha trascendido, no podrá tampoco salir de España. Es la cuarta persona que el juez deja en libertad con medidas cautelares desde que comenzó a instruir este sumario, que se encuentra secreto.
Garzón también dejó ayer en libertad con comparecencias semanales a Álvaro Pérez Alonso, El bigotes, responsable de la empresa Orange Market, filial en Valencia de Special Events, la empresa con la que Correa organizó actos para el PP hasta 2004.
El lunes también quedaron libres con comparecencias mensuales las tres primeras imputadas a las que el juez ha llamado a declarar, -Carmen Rodríguez Quijano (esposa de Correa), Luisa Jordán y Carmen Luis Cerezo-, con lo que sólo hay tres personas encarceladas en esta causa: el presunto líder de la trama y dos de sus máximos colaboradores, su primo Antoine Sánchez y Pablo Crespo.
A todos ellos, Garzón les acusa de los delitos de tráfico de influencias, fraude fiscal, blanqueo de capitales, cohecho y asociación ilícita.