¿Falta de creatividad o creatividad al dictado?
- Los guiones de las principales candidatas al Oscar a mejor película son adaptaciones
- Dos novelas, una obra dramática, un documental y un relato, su origen
- El 60% de las ganadoras en la última década contaron con un guión adaptado
- En los últimos siete, el porcentaje crece hasta el 85%
- Más información en el Especial Oscar 2009
Que la creatividad está en crisis en la meca de cine es una afirmación que no admite lugar a dudas. De ahí el hecho de que las cinco nominadas por la Academia de Cine de Hollywood como mejor película para los Oscar 2009 sean adaptaciones de libros, obras de teatro o documentales.
Lo que ocurre en esta edición no es sino la confirmación de una tendencia que comenzó a mediados de la década de los 90, cuando 'recontar' lo que otros ya contaron comenzó a ser reconocido con una estatuilla por los académicos estadounidenses.
La huelga de guionistas del pasado año parece ser una de las causas más evidentes de este 'vacío de ideas' en esta edición.
Quizás no sea sólo falta de creatividad lo que acusa el mercado estadounidense. El hecho de que el 60% de las cintas ganadoras del título de mejor película en los últimos diez años contase con un guión adaptado, ha podido ayudar a los productores a decantarse por este tipo de producción. Si nos centramos en los últimos siete, el porcentaje crece hasta el 85%.
¿Por qué innovar cuando 'copiar' funciona?
Echando la vista atrás, desde 1999, en la categoría de mejor película, sólo Shakespeare in Love, American Beauty, Gladiator y Crash han presentado un guión original, textos merecedores del Oscar en todos los casos, excepto en el de la cinta de Gladiator, cuyo guión fue derrotado por el de Casi famosos.
Otros títulos imprescindibles en toda videoteca, como la gran vencedora de 2007, Infiltrados, de Martin Scorsesse, o la archifamosa obra de Peter Jackson El Señor de los Anillos, fueron fruto de un arduo trabajo basado en una historia ya existente. Algo que también ocurrió con los guiones de Una mente maravillosa, Forrest Gump, Chicago o Million Dollar Baby, por poner sólo algunos ejemplos de los Oscar a las mejores películas de los últimos años.
De las nominadas en 2008 a mejor película, sólo Juno y Michael Clayton habían sido 'paridas' originariamente para la gran pantalla. Y las dos se llevaron un único galardón, aunque contaban con numerosas nominaciones: Juno partía con cuatro y conquistó el de Mejor Guión Original; Michael Clayton aspiraba a siete galardones y sólo obtuvo el de Mejor Actriz de Reparto, que fue a caer a manos de la británica Tilda Swinton.
La gran triunfadora, No es país para viejos, que se alzó con cuatro estatuillas de las ocho categorías en las que estaba nominada, era, una vez más, una historia "no nacida de la nada".
Este año, más de los mismo. Aquella cinta que saboree la gloria, lo hará con un guión adaptado, aunque no hay que desmerecer este noble de arte de 'versionar' historias ya de por sí redondas.
Dos novelas, una obra dramática, un documental y un relato
Slumdog Millonaire, la más independiente de las nominadas en esta edición, está basada en una novela del escritor hindú Vikas Swarup, titulada Question and Answer (Q&A). Simon Beaufoy -autor del guión de Full Monty- fue el encargado de adaptar el libro para el largometraje que dirige Danny Boyle, aunque dotándolo de un lenguaje puramente cinematográfico y con marcado sabor bollywoodiense. Beaufoy realizó tres viajes a la India buscando ese "sentido de comunidad" en el que el espectador se imbuye al ver la película.
El Desafío - Frost contra Nixon reconstruye la filmación de una histórica entrevista que ya llevó Peter Morgan a los teatros de Londres en 2006. En 1977, Frost era un frívolo periodista que puso contra las cuerdas a Nixon, derrotado por el Watergate pero no hundido. El director de El Desafío, el oscarizado Ron Howard -Una mente maravillosa-, salió encandilado de la representación en Londres y decidió llevarla al mundo del celuloide.
Mi nombres es Harvey Milk parte de un hecho histórico: el asesinato del primer concejal gay de la ciudad de San Francisco, en el año 1978. Un tiempo convulso, en el que Milk lideró la lucha por los derechos del colectivo homosexual. El director de la cinta, el estadounidense Gus Van Sant, merecedor del Oscar al mejor documental largo en 1985, para adentrarse en esta dura historia. Mucho se ha escrito de este personaje, del que se han publicado varias biografías, entre ellas la del periodista Randy Shilts, publicada en 1982 bajo el título The Mayor of Castro Street ('El alcalde de la calle Castro').
The Reader (El lector) cobra forma bajo la dirección de Stephen Daldry y basándose en el best-seller homónimo del escritor alemán Bernhard Schlink. Un libro publicado en 1995 y que simboliza esa tendencia en alza de exportar al cine todo éxito literario. La obra ha sido traducida a 39 idiomas distintos y ha conseguido numerosos premios, que avalaban su entidad de cara a ser versionada al cine. Fue precisamente Bernhard Schilink, en colaboración con David Hare, quien adaptó la novela, por lo que la fuerza con la que el autor imaginó en un principio a los personajes apenas se ha visto amenazada.
El curioso caso de Benjamin Button, la cinta que completa las candidatas a mejor película, 'mama' de un relato fantástico del estadounidense Francis Scott Fitzgerald, publicado en 1921 y de poco más de 9.000 palabras. Una extensión de 25 páginas le sirvió a David Fincher -director de Seven- para 'crear' esta película llena de efectos especiales y envuelta en un mundo de ensoñación.
Sea la que sea, lo único cierto es que la cinta ganadora "deberá" compartir méritos con el dueño originario de tan genial idea.