Georgia acusa a Rusia de una nueva invasión de su territorio en Osetia

• Un grupo de militares rusos ha ocupado un puesto de la policía georgiana, según Tiflis
• Las tropas no se han retirado hasta que han llegado los observadores de la OSCE

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Georgia ha acusado a Rusia de una nueva provocación en la zona de conflicto de la región separatista de Osetia del Sur, en tensa calma desde la completa retirada de las tropas rusas.

Según un comunicado difundido por la Cancillería georgiana, medio centenar de militares rusos y un carro blindado entraron hacia el mediodía en la localidad de Kvemo Nikozi (situada en la zona controlada por las autoridades georgianas), bloquearon el puesto de control de la Policía y comenzaron la construcción de fortificaciones.

Los militares rusos sólo se retiraron cuando llegaron al lugar los observadores de la Unión Europea y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).

"Ha sido un nuevo intento, planificado por los invasores rusos, de provocar un enfrentamiento con los policías georgianos", indica la nota.

Destaca que el nuevo incidente "provoca especial preocupación, dado que últimamente Rusia pretende frustrar la permanencia de observadores internacionales en Georgia".

El Ministerio georgiano de Asuntos Exteriores insiste en que "la única vía para garantizar la estabilidad y la paz en el área es una mayor activación de las misiones de los observadores internacionales que funcionan en Georgia y su posterior transformación en verdaderas fuerzas pacificadoras y misiones policiales".

Tanto los militares como diplomáticos rusos no informaron ni comentaron el incidente.

Georgia y Rusia protagonizaron un breve conflicto bélico en agosto pasado por el control de Osetia del Sur.