Japón planea comprar acciones para animar a la Bolsa

• El Ejecutivo pretender crear una institución que participe en el mercado bursátil
• Se plantea esta decisión ante la imparable caída de las cotizaciones

Un hombre mira a un índice bursátil en Tokio, 24 de febrero de 2009.

El Gobierno japonés baraja la posibilidad de utilizar fondos públicos para comprar acciones y otros activos en el mercado de valores con el fin de frenar las continuas caídas de la Bolsa, ha informado este martes el diario económico Nikkei.

La caída del índice Nikkei cercano a los niveles más bajos de los últimos 26 años, cuando sufría el fin de la burbuja inmobiliaria, ha encendido las alarmas en la Dieta (Parlamento japonés).

El Gobierno se plantea dos medidas:

 La coalición de Gobierno, liderada por el Partido Liberal Demócrata, ha presentado una propuesta para intervenir en el parqué antes de finales de marzo, con el propósito de animar las cotizaciones antes del cierre del año fiscal japonés. El Estado actuaría como garante del pago de intereses en operaciones de compra-venta de acciones mediadas por instituciones financieras japonesas, hasta un máximo de 20 billones de yenes (161.990 millones de euros).

• Por otro lado el Ejecutivo está considerando presentar un proyecto de ley para crear una institución que, conjuntamente con el sector privado, participe en el mercado bursátil, según asegura este martes la agencia local Kyodo. Esta institución se encargaría de comprar activos "tóxicos"  para retirarlos del mercado y también de comprar valores de otras compañías cotizadas en Bolsa.

Las continuas caídas que ha experimentado el principal índice japonés, el Nikkei, han aumentado las preocupaciones de que las empresas cierren el año fiscal 2008 con pérdidas mayores asociadas al mal rendimiento de sus propias inversiones en Bolsa.

En 2008 el selectivo tokiota perdió el 42% de su valor bursátil y en lo que va de año ya se ha dejado casi el 20%.

Se prevé que la ley pueda ser aprobada el 6 de marzo y entre en funcionamiento poco antes del inicio del nuevo año fiscal japonés en abril.