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Fernando Meirelles: "Estaba convencido de que Saramago iba a detestar la película"

  • El brasileño Meirelles dirige A Ciegas (Blindness), que se estrena el 13 de marzo
  • Es la adaptación de un libro del Nobel José Saramago, satisfecho con la adaptación
  • Saramago negó durante años la cesión de los derechos del libro
  • Es una historia apocalíptica de una epidemia de ceguera que sacude al mundo

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La semana que viene llega a los cines "A ciegas", la última pelicula del brasileño Fernando Meirelles

Fernando Meirelles, el director brasileño de A Ciegas (Blindness), no respiró tranquilo hasta que el Premio Nobel de Literatura José Saramago vio la adaptación al cine de su novela Ensayo sobre la ceguera y le dio su aprobación, emocionado.

"Después de las duras críticas que tuvo en el Festival de Cannes, estaba convencido de que Saramago iba a detestar la película. Y fue una grata sorpresa porque estaba realmente emocionado. Fue muy impresionante y bonito", explica Meirelles en una entrevista con RTVE.es. Ese Saramago emocionado puede verse en You Tube, donde el hijo de Meirelles colgó el vídeo de su reacción tras ver la película.

A ciegas, que se estrena en España el 13 de febrero, narra la historia de una extraña epidemia de ceguera que sacude a un país. Las primeras víctimas son encerradas a cal y canto en un hospital sin recibir explicaciones ni apoyo alguno del mundo exterior. Entre ellas se encuentra una mujer (Julianne Moore) que, aunque es la única que no ha perdido la visión, guarda el secreto para poder estar junto a su marido ciego (Mark Ruffalo). 

Y es que llevar al cine la apocalíptica novela y bestseller internacional que el escritor portugués publicó en 1995 ha costado muchos años, porque Saramago se oponía a ceder sus derechos, hasta que el productor Niv Fichman y el guionista Don McKellar se presentaron en su casa de Lanzarote.

"No me gustan las adaptaciones literarias y siempre había dicho que no. Pero yo soy muy de antipatías y simpatías. Vinieron, me gustaron sus caras y después de haber dicho no cuarenta veces, no tuve ningún problema en decirles sí a ellos", ha explicado el escritor en rueda de prensa, que considera la película "una adaptación casi perfecta, porque no hay nada perfecto".

Impresionado por el libro

Al proyecto se uniría más tarde Meirelles como director, quien se sintió "muy impresionado" tras leer el libro en 1997 y que considera la película el "pretexto" perfecto para seguir metido en la historia de un libro que no quieres que se acabe. A Saramago, que le gustaron mucho las dos películas anteriores de Meirelles - Ciudad de Dios (2002) y El Jardinero Fiel (2005)-, le pareció perfecto.

Sólo le ha disgustado la traducción del título al español, porque "hacer las cosas a ciegas es hacerlas sin saber lo que quieres hacer realmente y no es lo que ocurre en la historia, donde todos los personajes son ciegos de verdad".

La "ceguera blanca" que afecta a los protagonistas es la forma que tiene la película -también el libro- de explorar el comportamiento humano llevado al extremo, de lo mejor y lo peor que somos capaces de hacer: "Es una historia sobre la naturaleza humana. No creo que sea una película pesimista, es realista y revela un aspecto de la naturaleza humana", reflexiona Meirelles porque, pese a todo, la cinta deja una puerta abierta a la esperanza.

Es también esa ceguera la que condiciona la estética de la película, con planos que funden a blanco prácticamente quemados y con desenfoques que pretendían adaptar la visión de los ciegos.

Ciudad genérica y casting multiétnico

De A ciegas, una coproducción de Canadá, Brasil y Japón, dicen mucho también las localizaciones y el elenco de actores. Así, aunque alguna escena se rueda en Montevideo (Uruguay) y el hospital es una antigua cárcel de Canadá, la ciudad de rodaje es Sao Paulo porque es "una gran ciudad muy genérica que podría estar en cualquier parte del mundo" -en la película no se identifica la localización-, según su director.

 

Mientras, los actores son "de muchas partes, con muchos acentos y con un inglés mexicano, brasileño, japonés... Es un casting multiétnico porque era una historia sobre la humanidad", afirma Meirelles.

Tras la angustiosa crudeza de A ciegas, tendremos que esperar otros dos o tres años para ver el nuevo trabajo de Meirelles, que seguramente será una comedia. "Tengo dos guiones de comedia sobre la mesa, que son muy simples cinematográficamente y como historia, y antes de final de marzo tengo que decidir qué hacer".

Y es que el director brasileño apenas ha tenido tiempo con su dedicación a la promoción de la película desde el año pasado -España es el último país donde se ha presentado- y después de haber hecho una miniserie para la televisión brasileña.

No obstante, sí tiene tiempo para ver otras películas, como la oscarizada Slumdog Millonaire, que encuentra muy parecida a Ciudad de Dios ... "en la cámara suelta, los colores, los actores no profesionales...", aunque puntualiza que la película de Daniel Boyle es una "fábula de amor" frente a la dureza "más próxima a la realidad de las favelas" de Ciudad de Dios.