Alerta en toda España por fuertes vientos y nieve
- Ocho provincias están en alerta naranja y otras 32 en alerta amarilla
- La inestabilidad se asienta de nuevo en la Península tras dos semanas de tregua
- Sólo se salvan Pontevedra, Valladolid, Barcelona, Tarragona, Gerona, Mallorca y Canarias
- La cota de nieve baja hasta los 600-800 metros en el norte del país
El viento, la nieve y el oleaje ponen en alerta a casi toda España, con diez provincias en alerta naranja -riesgo importante- y otras 32 en alerta amarilla -riesgo-, así como las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, según las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Así, la inestabilidad se asienta de nuevo en la Península tras dos semanas de 'tregua anticiclónica' y está previsto también descenso de los termómetros y lluvias.
Sólo se salvan de la alerta el interior de Pontevedra, Valladolid, Barcelona, Tarragona, Gerona, Mallorca y todas las provincias canarias. Además, en la costa gallega y toda la cornisa cantábrica y el litoral almeriense hay alerta naranja por olas. También en alerta naranja por nieve se encuentran Asturias, León, Cantabria, Vizcaya, Alava y Navarra, y por viento, Madrid, Cuenca y Albacete, donde también hay riesgo de nevadas.
Mientras, en Baleares se registrarán precipitaciones débiles o moderadas ocasionales y aisladas y en Canarias, habrá intervalos nubosos y probabilidad de alguna lluvia débil en el norte de las islas de mayor relieve.
Así, la AEMET prevé nevadas en la zona norte peninsular y zonas de montaña del interior, además de vientos fuertes o muy fuertes en muchos puntos de la Península e Ibiza. Concretamente, estarán muy nubosos en el cuadrante noroeste peninsular con precipitaciones débiles a moderadas, más intensas en el norte de Galicia y en el área Cantábrica, donde podrán ser persistentes y localmente fuertes y acompañadas de tormenta.
La cota de nieve baja a 600 metros en el norte
Igualmente, se registrarán en forma mas débil cuanto más hacia el sureste y posteriormente se extenderán a toda la Península, siendo menos probables en el área mediterránea y más intensas en las áreas de montaña. La cota de nieve en la Península está previsto que se sitúe de inicio en unos 1200- 1500 metros, bajando hasta unos 600 u 800 metros en el norte y 900-1200 metros en el resto de la mitad norte y zona centro.
En la Península, las temperaturas nocturnas irán en ligero o moderado ascenso en el noroeste, y tan sólo se registrarán heladas débiles solamente en zonas de montaña. Las diurnas descenderán de forma ligera o moderada en el noroeste y ascenderán de forma ligera o moderada en el sureste y en Levante. En Baleares, se mantendrán sin cambios y en Canarias en ligero ascenso.
Los vientos soplarán de forma moderada o fuertes de componente oeste en la Península, Baleares, Ceuta y Melilla, y con rachas muy fuertes en los litorales cantábrico y andaluz, en muchos puntos del interior peninsular y en Ibiza. Finalmente, en Canarias serán moderados de componente norte con algún intervalo fuerte.
Recomendaciones ante el temporal
Ante esta situación Protección Civil recomienda que ante las nevadas en el caso de que sea imprescindible viajar por carretera, informarse de la situación meteorológica y el estado de las carreteras, así como extremar las precauciones, revisar el vehículo y atender las recomendaciones de Tráfico. Asimismo explica que es útil llevar ropa de abrigo y un teléfono móvil con batería de recambio o cargador de automóvil.
Por otro lado, señala que en caso de quedar atrapado en la nieve, se permanezca en el coche, con la calefacción puesta, renovando cada cierto tiempo el aire y vigilando que el tubo de escape no esté obstruido para evitar que los gases penetren en el interior del vehículo. En caso de quedarse aislado y necesitar ayuda, aconseja no resolver la situación por uno mismo, informar de este hecho y, salvo que la situación sea insostenible, esperar asistencia.
Ante fuertes vientos en la costa, Protección Civil resalta la importancia de alejarse de la playa y de otros lugares bajos que puedan ser afectados por las elevadas mareas y oleajes que suelen generarse ante la intensidad de vientos fuertes.