El juez de EE.UU. no admite la principal línea de defensa de María José Carrascosa
- No tendrá en cuenta la alegación de que su ex marido la envenó por falta de pruebas
- La española dice que no devolvió la custodia de la niña por temor
- La Audiencia de Valencia le dio la razón e impidió que su hija volviera a EE.UU.
El proceso judicial de la española María José Carrascosa, en prisión en Estados Unidos desde hace más de dos años por un conflicto sobre la custodia de su hija, no ha comenzado con buen pie, ya que el juez ha rechazado la principal línea argumental de su defensa.
"Mi principal argumentación era el envenenamiento (que supuestamente sufrió la española por parte de su ex marido) y el juez ha dicho que no me va a permitir ir en esa línea", ha resumido el abogado de Carrascosa, Scott Finkenauer, al terminar la vista celebrada este martes en un tribunal de Hackensack, en el condado de Bergen (Nueva Jersey, costa este).
En la prisión de ese condado, Carrascosa espera a ser juzgada por ocho delitos de interferencia en la custodia de su hija, fruto de su matrimonio con el estadounidense Peter Innes. Además, está acusada de desacato a una orden judicial, por no traer de vuelta a EE.UU. a la niña, con la que Carrascosa se fue a España en el 2005 sin atender a un acuerdo privado establecido entre los padres a raíz de su separación. La niña vive ahora en Valencia con sus abuelos maternos.
Tras nueve meses de dilaciones, el juez Donald Venezia ha escuchado de la Fiscalía y del abogado de Carrascosa las observaciones relacionadas con los testigos y los argumentos de cada parte.
No se juzga al ex marido
La defensa intenta demostrar que la abogada no trajo a la niña porque tenía miedo de Innes ya que éste, según su versión, la había estado envenenando incluso desde que estaba embarazada de Victoria. Sin embargo, la fiscal Carol Novey Catuogno ha defendido que, en primer lugar, no se han aportado evidencias de que cuando Carrascosa marchó a España con la niña estuvieran siendo envenenada con pesticidas, tal y como defiende ella, y, en segundo lugar, "no hay evidencia alguna de que Innes esté relacionado con ello".
En ese mismo sentido se pronunció el juez, que preguntó a Finkenauer: "¿Cómo piensa usted relacionar lo del envenenamiento con su ex marido?. No hay conexión razonable. No le permitiré ir por ahí". Por ese motivo, buena parte de los 17 testigos que había propuesto convocar no serán llamados a declarar, a no ser que en la próxima vista, prevista para el 29 de abril, la defensa de Carrascosa aporte evidencias de que Innes quiso envenenarla.
El juez tampoco se mostró dispuesto a permitir que se llame a declarar a amigos de Carrascosa sobre los supuestos malos tratos de Innes, a no ser que realmente vieran alguna agresión y no sólo "marcas que ella dijo que le causó su marido", según el magistrado. Además, insistió en que "esta causa es del Estado contraCarrascosa, no de Innes contra Carrascosa ", por lo que "no se va a entrar a debatir si este señor era o no la persona más mala del mundo, lo que se está juzgando es la interferencia en la custodia y no haber traído de vuelta a la niña".
Dos justicias enfrentadas
También presente en la vista en calidad de abogado de Carrascosa en España, el letrado Marcos García Montes ha lamentado que "el juez no quiera entrar en temas relacionados con Peter Innes". El abogado ha dicho que en España la justicia ha considerado por ejemplo el testimonio de un médico español que dice que María José fue envenenada con arsénico.
Tras la vista, Finkenauer ha explicado que aunque Carrascosa perdiera este juicio y sea condenada a cinco años de cárcel --y en ese caso podría salir en libertad porque la media de cumplimiento efectivo para esas condenas es de un año y medio--, aún le quedaría pendiente una causa en un Tribunal de Familia.
Aunque la Justicia estadounidense concedió al ex marido la custodia, la Audiencia Provincial de Valencia determinó que la custodia era de Carrascosa, abogada de profesión, y además retuvo el pasaporte a la niña.