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El PSOE propone la eliminación de los paraísos fiscales

  • El PSOE presenta una proposición no de ley para "recuperar el sentido ético de las finanzas"
  • Penalizará los movimientos de fondos con destino a paraísos fiscales
  • Propone la supresión del secreto bancario y el aislamiento de los estados que no colaboren

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El grupo parlamentario socialista ha presentado ante la Mesa del Congreso de los Diputados una proposición no de ley que persigue la eliminación de los paraísos fiscales.

La propuesta insta al Gobierno a "promover a nivel internacional y nacional las medidas necesarias para incrementar la transparencia en el sistema financiero".

Entre las medidas que introduce esta iniciativa destaca la introducción de "desincentivos fiscales para todo movimiento de fondos que tengan como origen o destino un paraíso fiscal" así como la "prohibición de que las entidades bancarias tengan filiales o sucursales en dichos territorios".

También propone "la supresión del secreto bancario estableciendo medidas severas de aislamiento financiero para los estados que no quieran colaborar".

Según el Grupo Parlamentario Socialista, hay que tomar las medidas necesarias para "recuperar un sentido ético de las finanzas", por lo que "los esquemas de retribución para ejecutivos y altos cargos de las entidades financieras deben ligarse a la evolución real de la empresa a lo largo del tiempo y deben quedar sujetos a la publicación individual y su aprobación por los accionistas minoritarios".

El PSOE también recomienda al Ejecutivo reformar las instituciones financieras multinacionales con el fin de fortalecer sus capacidades "para actuar en la crisis actual y evitar crisis futuras".

En esta línea, la proposición no de ley considera necesario reforzar los recursos del Fondo Monetario Internacional para "proteger su papel como prestamista de última instancia", capacitar al FMI como "supervisor financiero internacional" y establecer "un sistema de vigilancia y alerta temprana para prevenir nuevas crisis".

Por eso, los socialistas consideran que el FMI "debe reformar su sistema de gobernanza" para incluir "a las nuevas economías emergentes en la toma de decisiones y facilitar la silla única para los países de la zona euro". Las reformas deberían facilitar, desde su punto de vista, "el intercambio de información financiera entre países".