Enlaces accesibilidad

El Gobierno de EE.UU. quiere intervenir instituciones no bancarias

  • En la actualidad, sólo pueden intervenir los bancos
  • Los nuevos poderes permitirían a una nacionalización de facto
  • Darían al Gobierno la autoridad de romper contratos, como las primas de AIG
  • Bernanke dice que la caída de AIG hubiera desencadenado otra Gran Depresión
  • Geithner reconoce que debería haberse enterado de las primas cinco meses antes

Por
El Gobierno de EE.UU. y la FED piden al Congreso más poder para intervenir en entidades no financieras

"Llegamos a la crisis sin la autoridad ni las herramientas adecuadas", ha señalado el secretario del Tesoro, Tim Geithner, en su comparecencia parlamentaria para explicar su gestión en la aseguradora AIG. Geithner ha añadido que pedirá al Congreso el próximo jueves esa "autoridad para lidiar con nuevos AIGs", para, entre otras cosas, "renegociar los contratos" de las compañías rescatadas por el Gobierno. 

El diario Washington Post da más detalles sobre las intenciones de la administración Obama. Serían poderes sin precedentes para tomar el control de entidades financieras no bancarias, tales como aseguradoras, fondos de inversión y hedge funds -fondos de alto riesgo-. Todas aquellas compañías cuya caída pueda arrastrar al resto del sistema financiero.

"Necesitamos una autoridad capaz de cambiar los contratos, capaz de cambiar el modelo de negocio y capaz de desenredar lo que no funciona", ha dicho el secretario de Comunicación, Robert Gibbs, en una entrevista con la CNN. "El tipo de autoridad que nos permita lidiar con problemas como los de AIG, que dirija el riesgo sistémico sin tener que llevar a la compañía en cuestión a la bancarrota". En la actualidad, el Gobierno de Estados Unidos sólo tiene autoridad para tomar el control de los bancos.

Poderes para nacionalizar de facto

El Washington Post ha tenido acceso a un documento interno de la administración que detalla los poderes a los que se refiere Gibbs. Ese documento, todavía en fase de elaboración, se remitirá al Congreso esta misma semana. La propuesta de Obama consiste en una agencia gubernamental que asumiría un nuevo papel como regulador de los riesgos que afecten a todo el sistema financiero, con amplia capacidad de supervisar aquellas entidades que puedan desestabilizar la economía. 

Con los nuevos poderes, el Gobierno podría tomar el control de esas compañías y utilizar un conjunto de herramientas para impedir su quiebra, tales como garantías contra las pérdidas, compra de activos o propiedad parcial. Esa autoridad le permitiría romper los contratos, como aquellos que han estipulado las primas de AIG.

El miedo y la rabia de Bernanke

El presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, que comparece junto a Geithner, ha explicado que si se hubiera dejado caer a AIG se habría desencadenado otra Gran Depresión como la de los años 30. "En el mejor de los casos, el fracaso de AIG habría intensificado una crisis ya severa. Pero es concebible que desembocara en un desastre financiero global, del estilo de los años 30, con implicaciones catastróficas para la producción, los ingresos y el empleo". 

Bernanke ha añadido que pensó en demandar a AIG para impedir que se pagaran las primas, pero los abogados de la FED le aconsejaron que desistiera. "Era muy inapropiado pagar primas sustanciales a los empleados responsables del colapso de AIG. Pedí por tanto que se frenaran, pero se me informó que estaban estipuladas en contratos vinculantes. Pedí luego que se demandara a la compañía, pero mi departamento legal me aconsejó en contra, ya que la ley de Conneticut garantiza indemnizaciones cuantiosas si fracasa la demanda, que hubieran tenido el efecto perverso de duplicar o triplicar los beneficios de los ejecutivos".

Contraofensiva a cuenta de AIG

Los 165 millones que ha pagado AIG a los ejecutivos de su unidad de productos financieros son el núcleo de la comparecencia de Geithner en el Congreso. El secretario del Tesoro da explicaciones de por qué permitió que se pagaran cuando el Estado ya posee el 80% de la aseguradora. Cuándo se enteró de las primas y por qué intervino para desactivar una enmienda en el plan de estímulo que las habría impedido.

En este sentido, Geithner ha reconocido que debería haberse enterado de las primas a finales del pasado mes de septiembre, cuando dirigía el rescate de AIG en calidad de presidente de la Fed en Nueva York. "Supe que teníamos que lidiar con un buen desastre a propósito de las compensaciones. Debería haber tenido, pero no tuve, conocimiento detallado de las primas hasta que me informó mi equipo el pasado 10 de marzo".

La opinión pública norteamericana está indignada con la recompensa a unos ejecutivos responsables de los credit default swaps, los derivados financieros que han amplificado la crisis. La Cámara de Representantes ha recogido el guante y aprobó el pasado jueves un nuevo impuesto especial para recuperar el 90% del dinero cobrado. Sin embargo, el propio Obama ha cuestionado la constitucionalidad y legalidad de la medida, desautorizando a los legisladores.