Corbacho rechaza bajar los impuestos y el PP pide al Gobierno austeridad

• El ministro de Trabajo asegura que hay que incentivar el gasto para salir de la crisis
• Así, ha rechazado modificar la fiscalidad o las aportaciones a la Seguridad Social
• Cristobal Montoro, del PP, insta al Goberno a ser austero y rebajar los impuestos
• Los empresarios proponen un contrato que pague el despido con 20 días por año trabajado
• Los sindicatos, por su parte, han rechazado cualquier abaratamiento del despido

Corbacho rechaza bajar impuestos y el PP pide austeridad

Todos han coincidido en que España saldrá de la crisis; sin embargo, las divergencias han aparecido a la hora de aportar las soluciones concretas para conseguirlo. TVE ha reunido a Gobierno, oposición, sindicatos y empresarios en un debate centrado en la crisis económica que ha vuelto a revelar las diferencias que existen entre el Ejecutivo socialista y el Partido Popular, por un lado, y entre patronal y trabajadores, por otro.

En el ámbito político, el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho ha insistido en que no se pueden cuestionar el sistema fiscal ni las aportaciones a la Seguridad Social, como solicitan los empresarios y el PP, al tiempo que advertía de que bajar los impuestos implica reducir las prestaciones sociales.

"Hay que incentivar el gasto, pero no el gasto corriente, que hemos reducido en 1.500 millones de euros", ha afirmado Corbacho, que además ha recalcado que España es el país "que más recursos ha movilizado de toda Europa, 50.000 millones de euros" para salir de la crisis.

Desde el PP, el portavoz de Economía, Cristóbal Montoro, ha exigido "austeridad en el gasto público" que permita "bajar los impuestos a las PYMES, a las familias", así como incrementar la competencia.

En una línea similar se ha manifestado el presidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, quien ha argumentado que las empresas españolas "llevan años perdiendo competitividad", por el diferencial de inflación con el resto de Europa. "Ahora no podemos devaluar la moneda, hay que abaratar los costes", ha subrayado Díaz Ferrán, que ha pedido que se reduzcan en tres puntos las cuotas empresariales a la Seguridad Social y ha pedido "que se bajen más los impuestos, es imprescindible".

Flexibilizar el mercado laboral

El representante de la patronal también ha abogado por flexibilizar el mercado laboral, introduciendo un nuevo contrato indefinido que recoja una indemnización, en lugar de 45 días por año trabajado hasta 42 meses, de 20 días por año trabajado hasta 12 meses. A su juicio, este contrato permitiría convertir en fijos muchos contratos temporales y ofrecer empleo a bastantes de los 3,5 millones de parados que hay en España.

Sin embargo, los representantes de los sindicatos han rechazado abaratar el despido e incluso han negado que la solución de la crisis sea una reforma laboral. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha argumentado que España "es muy competitiva en costes laborales" y ha abogado por "dar confianza a los 16 millones de ocupados" para sortear la crisis.

"Tenemos un modelo laboral excesivamente flexible ya, con 14 puntos de temporalidad por encima de la media europea. En España hay muchísima facilidad para despedir", ha abundado el secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, que ha pedido inversión pública para "reactivar el consumo", al tiempo que rechazaba rebajas de impuestos.

Modelo productivo

El presidente de CEPYME, Javier Bárcenas, ha subrayado que la principal reivindicación de las pymes a corto plazo es la falta de financiación: "la línea ICO no llega", le ha reclamado a Corbacho, que ha reconocido cierto retraso en la aplicación efectiva de las medidas.

Bárcenas también ha incidido en la necesidad de mejorar la formación de los trabajadores, tanto de los que están en activo como de los que se incorporan a las empresas, por lo que ha reclamado un pacto nacional sobre educación.

En este sentido, todos los participantes han destacado que se debe modificar el modelo productivo, reduciendo la importancia de la construcción y avanzando hacia una economía más competitiva y centrada en la innovación y las nuevas tecnologías.

No obstante, han aflorado los matices y Corbacho ha insistido en que ese nuevo modelo "no puede hacer retroceder el modelo de bienestar social que tantos años no ha costado conseguir". Montoro ha respondido que "lo social es crear empleo. La gente quiere oportunidades, no limosnas".

También el presidente de la CEOE ha insistido en que "no hay mejor labor social que la creación de puestos de trabajo", por lo que ha pedido un mejor marco para las empresas, mientras los sindicatos propugnaban fortalecer el sistema de protección social.

Pactos

Sobre la posibilidad de alcanzar un pacto nacional para abordar la situación económica, las opiniones también han sido dispares, ya que, mientras Fernández Toxo afirmaba que "es posible un gran pacto" y Bárcenas también pedía "un acuerdo para varias legislaturas", Méndez prefería "impulsar el diálogo social y que los dos principales partidos alcancen un pacto institucional".

Montoso ha señalado que, más que pactos de Estado, "este es el momento de políticas concretas. La oposición está tendiendo la mano, pero el Gobierno no la ha aceptado, porque no coincidimos en el diagnóstico". En este sentido, ha aclarado que la labor del PP "es proponer alternativas, no ser corresponsable de una política del Gobierno".

Corbacho, por su parte, ha dicho esperar que esa voluntad del PP se concrete y ha asegurado que el Gobierno "va a propiciar el consenso", especialmente en el diálogo social entre empresarios y trabajadores, para concluir el debate tal como lo empezó: asegurando que vamos a salir de la crisis.