El Gobierno, obligado a admitir enmiendas en su plan urgente contra el paro
- Los grupos parlamentarios muestran reticencias al plan contra el empleo
- Finalmente el Congreso aprueba tramitar el plan como proyecto de ley
- El Congreso abre así la vía para enmendar las medidas sobre empleo del Gobierno
- La totalidad de los grupos han criticado el plan por "insuficiente" y "coyuntural"
- Corbacho ha defendido la extraordinaria urgencia y necesidad del decreto ley
- El PP dice que "el socialismo crea paro" y que el Gobierno es el "peor de la historia"
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El Congreso de los Diputados ha lanzado un mensaje contundente al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. La totalidad de los grupos del arco parlamentario considera "insuficiente" para solucionar la sangría del paro en España el plan de medidas urgentes para el mantenimiento y fomento del empleo.
Por este motivo, los grupos de la oposición han obligado finalmente al Gobierno a tramitarlo como Proyecto de Ley y abrir la presentación de enmiendas a su plan, de tal forma que se puedan incluir cambios.
La convalidación del decreto ley se ha aprobado con 184 votos a favor ( PSOE, BNG y CiU) y 162 en contra, pero, a petición de todos los grupos de la Cámara, se ha realizado una segunda votación para que se tramite mediante un Proyecto de Ley, que ha sido aprobada por unanimidad.
El ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, había pedido previamente en el Congreso la aprobación de este decreto-ley por la dimensión de la crisis económica y su especial repercusión en el mercado de trabajo. Esto justifica, en su opinión, "su necesidad extraordinaria y urgente". El mensaje no ha calado en todos los grupos.
"El socialismo crea paro", dice el PP
El PP se ha mostrado en contra del plan y ha pedido su retirada porque es un plan "insuficiente" e "incoherente". "Basta ya de improvisación, la situación del paro es insostenible", ha espetado el portavoz económico del PP, Cristobal Montoro, que ha calificado al Ejecutivo de Zapatero como "el peor gobierno de la democracia". "El socialismo crea paro, no creen en la gente y así nos va", ha señalado.
Ha preguntado además a Corbacho "si no se ruboriza al decir claramente que el plan no cuenta con el apoyo de los agentes sociales". En este sentido, el ministro ha dicho que se trata de un plan de carácter coyuntural y que, aunque las medidas que lo conforman "no han sido formalmente acordadas con los empresarios y sindicatos", sí existe, en su opinión, la "visión generalizada de la necesidad de su puesta en marcha".
Las medidas se enmarcan, según ha explicado el titular de Empleo, en tres grandes capítulos: medidas para el mantenimiento del empleo, medidas de protección a las personas desempleadas y medidas para el fomento del trabajo. "Nadie podrá oponerse a este plan porque entonces se situará entre los que piensan que hay que abaratar el despido", ha señalado el ministro.
"Son pequeños parches", ha aseverado Montoro, que ha añadido: "Algunas medidas son correctas pero incluidas en un plan serio y coherente, no en esta improvisación que pretende el Gobierno".
"¿Con estas medidas se va a impedir que aumento del paro?, si usted es capaz de convencerme de eso, nos replanteamos el voto", ha preguntado Montoro, que ha pedido al Gobierno volver "a la España de las oportunidades y del empleo".
Los grupos critican el plan por "insuficiente" y "paliativo"
A pesar de que todos los grupos finalmente han votado por unanimidad la tramitación del plan como proyecto de ley, han sido muy críticos con las medidas que incluye el proyecto. Así, el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, lo ha calificado de "proyecto salomónico de los integrados" y de "desafortunado".
Ha criticado, además, la "tendencia irrefrenable" del Gobierno de legislar por decreto. Ha reconocido que existen medidas positivas pero insuficientes porque se olvida de los trabajadores que no tienen prestación por desempleo.
Más críticas le ha llovido al Gobierno por parte de ERC que, aunque también reconoce medidas adecuadas en el plan, también lo considera "insuficiente, con la que nos está cayendo". Al igual que IU, critican la discriminación que supone el plan para los parados que no cobran la prestación.
El PNV también ha mostrado sus reticencias al plan. El diputado nacionalista Emilio Olabarría ha señalado que la insuficiencia de las medidas es "tremenda". Además, no están concertadas con los sindicatos y las empresas, "y ahí ya hay un incumpliento del Gobierno que dijo que nunca plantearía medidas que no contaran con el concierto social".
CiU ha planteado la necesidad de reformar el mercado de trabajo. Para Uxue Barcos, de Nafarroa Bai, este plan incluye "medidas paliativas y coyunturales" y, en su opinión, lo que se necesita son medidas "estructurales de mayor calado".
En la misma línea se ha mostrado Rosa Díez, también del Grupo Mixto en el Congreso, que ha abogado por una reforma profunda del mercado de trabajo y no por medidas "coyunturales, que no abordan los problemas principales del empleo en España". Ha acusado al Gobierno de estar "encantado en su papel de apagafuegos" y ha dicho que las medidas de este nuevo plan están condenadas a fracasa por "improvisadas".
Seis medidas urgentes para impulsar el empleo
El plan de impulso del empleo, aprobado el pasado 6 de marzo por el Consejo de Ministros, consta de seis medidas y tiene una valoración económica que asciende a 1.577 millones de euros.
El plan incluye una serie de medidas que afectan a los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE), como la reposición de las prestaciones de los afectados por un ERE temporal y que posteriormente pierdan su trabajo, hasta un máximo de 120 días. Se permitirá a los afectados por un ERE dedicarse a otra actividad.
El real decreto incorpora también la aplicación de condiciones especiales de aplazamiento para el pago de cuotas a la Seguridad Social para empresas que atraviesen momentos de dificultad económica, con el objetivo de que ninguna compañía viable y solvente cierre por no poder hacer frente a pagos a la Seguridad Social.
Por otro lado, se bonificará a las empresas que contraten a desempleados en el 100% de la cuota empresarial de la Seguridad Social de ese trabajador, hasta alcanzar el importe de la prestación por paro que todavía le quedaba por percibir al empleado.
A ellas hay que añadir una sexta iniciativa, el reforzamiento de los Servicios Públicos de Empleo, que, siendo fruto también de la concertación social, no se incluye en el articulado porque no requiere modificaciones legislativas para su aplicación.