Liberan a dos empresarios españoles que llevaban 15 días secuestrados en Nigeria por sus anfitriones

• Los secuestrados fueron al país africano para llevar a cabo una misión comercial
• Han sido liberados en una operación conjunta entre Policía española y nigeriana
• Sus secuestradores pidieron a las familias un rescate de 200.000 euros
• La esposa de uno de los liberados asegura que vivieron una "situación límite"

Los empresarios españoles liberados en Nigeria después de haber estado secuestrados durante quince días fueron capturados por quienes les invitaron a acudir al país para llevar a cabo una misión comercial, según han informado fuentes policiales.

"Los españoles Josep Bufí y Alonso Boj fueron invitados a Nigeria por cuatro hombres que les propusieron visitar el país porque querían negociar con la empresa de los secuestrados", ha declarado en una rueda de prensa el jefe de la policía nigeriana, Mike Okiro.

Viajaron a Nigeria para realizar unas ventas de los productos de la empresa Innoenvas, ubicada en Polinyà (Barcelona), que fabrica maquinaria para el envase y procesado del café y a medida, y cuyos trabajadores se han felicitado por la resolución del secuestro porque "tenía mala pinta", han indicado.

Cuando llegaron a Nigeria el pasado día 15, los dos españoles, que ya habían sido invitados al país anteriormente, fueron informados por los cuatro secuestradores de que estaban retenidos, y les pidieron que se pusieran en contacto con sus familias para comunicarles la situación y pedirles un rescate de 200.000 euros.

"Un grupo de mafia nos cogió y nos llevó a un zulo"

"Se permitió a los dos secuestrados contactar con sus familias en España, a quienes les informaron de la cantidad que se debía pagar y cómo debía realizarse la transferencia para ser liberados", ha afirmado Okiro. "Al parecer, la familia se puso en contacto con el embajador de España en Nigeria, Ángel Losada Fernández, quien a su vez comunicó la situación a la policía nigeriana", ha detallado Okiro.

Uno de los secuestrados, Josep Bufí, ha explicado este martes, en declaraciones a la emisora RAC1, que "fuimos a Nigeria para cerrar unos contratos de unas ventas y un grupo de una mafia nos cogió y nos llevó a una especie de zulo, y allí nos tuvieron secuestrados", según un comunicado de la emisora.

"Nos dijeron -ha añadido- que aquello era un negocio y que no nos pusiéramos nerviosos, que pedirían dinero por nosotros y que, en cuanto pagaran, seríamos liberados".

Detuvieron a los cuatro secuestradores

Según relata el jefe del cuerpo de seguridad, la liberación de los dos empresarios españoles se produjo gracias a la detención de los cuatro secuestradores, a los que han identificado como Odi Vincent, Emma Omike, Nmadi Omike y Timothy Oghechi Meremikwe.

Bufí y Boj, quienes fueron liberados en la noche del pasado domingo día 29, llegarán este martes al aeropuerto de Madrid-Barajas procedentes de Abuya, la capital nigeriana vía Londres.

Agentes de la Policía española han participado junto a las fuerzas de seguridad nigerianas en las gestiones para lograr la liberación de los empresarios.

Varias personas han sido secuestradas en Nigeria a través de la táctica conocida como '419', código que utilizan las fuerzas de seguridad para identificar a los crímenes en los que se intenta obtener dinero bajo pretensiones falsas.

Vivieron "una situación límite"

La esposa del catalán Josep Bufí, María González, ha asegurado que los secuestrados han vivido una "situación límite" por la incertidumbre de cómo finalizaría el secuestro.

María González, que confiesa estar muy contenta por el final de la pesadilla que han vivido, viaja en estos momentos en coche hacia Madrid para recibir a su marido y también a su cuñado, hermano del anterior, que se desplazó a Nigeria al conocerse el secuestro.

Las dos familias han padecido esta situación de incertidumbre en silencio durante los quince días que ha durado, ya que el secuestro no ha trascendido hasta que Bufí y Alonso Boj, que trabaja para el primero, han conseguido ser liberados.

Bufí ha explicado que durante los días que estuvieron encerrados en el zulo "no nos trataron muy bien. Hemos comido mal y no cada día". Respecto a un posible rescate, el empresario catalán ha indicado que "creo que no se ha pagado".