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Muere el ex presidente argentino Raúl Alfonsín

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Muere el ex presidente argentino Raúl Alfonsín

Raúl Alfonsín, el primer presidente tras la dictadura militar argentina, ha muerto en Buenos Aires a los 82 años de edad víctima de una neumonía agravada por un cáncer pulmonar que lo aquejaba desde el 2007. En su mandato (1983-89), trabajó para juzgar a los resposables de la represión, aunque también firmó la amnistía en medio de fuertes presiones.

Tras conocer la noticia del fallecimiento, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner ordenó que se decretaran tres días de duelo nacional y cientos de personas se concentraron de forma espontánea frente a la vivienda de Alfonsín con velas en las manos y lágrimas en los ojos, y estallaron en vítores cuando el cuerpo del ex presidente fue sacado.

"Su figura está indisolublemente vinculada a la recuperación democrática de Argentina, luego de la dictadura más trágica que tuvimos los argentinos", ha dicho Fernández, visiblemente afectada por la noticia y quien probablemente no podrá asistir a los funerales ya que acaba de llegar a Londres para la cumbre del G-20.

La última aparición pública de Alfonsín había sido en octubre junto a la actual mandataria en la inauguración de un busto con su efigie en la Casa Rosada (sede del Gobierno).

"Lamentablemente a las 20.30 (de este martes, 01.30 horas del miércoles en la España peninsular) el doctor Alfonsín ha fallecido. Murió tranquilo, con mucha paz y en su domicilio, acompañado por todos sus familiares, como él quería", ha asegurado su médico personal Alejandro Sandler.

El médico ha comentado que el ex jefe del Estado "estaba dormido" cuando se produjo el deceso y ha recordado que Alfonsín, que padecía un cáncer pulmonar con metástasis ósea, "tuvo un cuadro de neumonía aspirativa en los últimos días y ello causó su muerte".

El decreto del duelo, firmado por el vicepresidente, Julio Cobos, ordena que se icen a media asta las banderas en los edificios públicos y que los restos de Alfonsín sean velados a partir de este miércoles en el Parlamento argentino, con todos los honores. Su familia --tuvo seis hijos-- ha dispuesto que sea enterrado el jueves a mediodía en el cementerio del barrio porteño de Recoleta.

Militante contra los militares

El ex mandatario, principal referente de la centenaria Unión Cívica Radical (UCR), hoy en la oposición, fue el gran ausente en los festejos del 25 aniversario de la vuelta del país a la democracia, conmemorados el pasado 30 de octubre. [Escuche el reportaje de Documentos de Radio Nacional]

Tras conducir la restauración democrática, logró llevar a juicio a los responsables de los crímenes de la dictadura militar más cruenta de la historia del país, aunque aprobó también polémicas leyes de perdón (como la Ley de Obediencia y Punto Final) en medio de contiuas asonadas militares, un fallido atentado y una grave conflictividad social (debido a la hiperinflacción).

Hijo de un gallego, estudió Derecho y fue un descatado activista de los derechos humanos, fundador de una organización pionera en la lucha contra la represión en su país. Su labor fue merecedora del Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional en 1985.

Reacciones

El ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007), que se comunicó con la familia, ha dicho que Alfonsín "dejó un montón de cosas positivas para el país y siempre estuvo en la misma tribuna diciendo lo que pensaba".

El peronista Eduardo Duhalde, presidente provisional entre el 2002 y el 2003, se ha mostrado "conmovido" por la muerte de Alfonsín, de quien ha recordado el "servicio que le hizo a la patria en su peor momento, en el 2001, cuando convenció a los suyos de ayudar a salir del trance y que el país se recuperara".

"Es un pesar común el que sentimos con todo el pueblo argentino por la pérdida de quien dio ejemplo de lucha y de compromiso con el país", ha apuntado el ex gobernante Fernando de la Rúa (1999-2001), integrante como Alfonsín de la UCR, segunda fuerza parlamentaria del país.

Para Carlos Ménem, que sucedió a Alfonsín en el poder en 1989, el ex mandatario fue un "verdadero amigo, más que adversario político".

Elisa Carrió, líder de la opositora Coalición Cívica, ha considerado que Alfonsín marcó una bisagra histórica y "quedará marcado porque hizo política, no era producto de las encuestas y además tenía ética y el sentido épico, heroico de la política".

Más allá de la política, el argentino más popular y actual seleccionador de fútbol, Diego Maradona, ha recibido la noticia con "mucha tristeza". "Cuando asumió la presidencia yo estaba en Barcelona y era muy importante la vuelta de la democracia a nuestro país", ha recordado el Pelusa. Maradona estuvo en el balcón de la Casa Rosada junto a Alfonsín cuando Argentina, bajo su capitanía, ganó el Mundial de México'86.

El portavoz de Alfonsín, José Ignacio López, ha agradecido en nombre de la familia todos los mensajes de condolencias que le llegan desde Argentina y desde América Latina (en Europa la noticia ha sorprendido de madrugada).