La Fiscalía pide el archivo de la investigación contra Israel por crímenes en Gaza
- El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu investiga un ataque a la franja en 2002
- El fiscal considera que Israel ya está investigando los hechos
- Por este motivo, cree que España no puede convertirse en una tercera instancia
- El magistrado ordenó seguir con el proceso al estimar que no hubo investigación
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha pedido el archivo provisional de la investigación que sigue el juez Fernando Andreu sobre el ataque israelí en la franja de Gaza del 22 de julio de 2002, ya que de la documentación facilitada por Israel se desprende que aún se están investigando estos hechos.
El pasado mes de enero, el juez Andreu admitió a trámite la querella interpuesta por el Centro Palestino para los Derechos Humanos (PCHR, por sus siglas en inglés) por estos hechos, y un mes después decidió seguir investigando porque de la documentación mencionada entendía que en Israel no había habido una investigación judicial.
Según han informado fuentes fiscales, es conveniente el archivo de esta investigación porque, si se llevara a cabo, "España se convertiría en una tercera instancia".
Andreu decidió imputar al al ex ministro de Defensa Benjamín Ben-Eliezer y a seis militares israelíes un delito contra la Humanidad por un ataque en la franja de Gaza el 22 de julio de 2002, en el que murieron un presunto líder de Hamás y catorce civiles, además de resultar heridas 150 personas.
El juez asumió la competencia de la causa en función de lo señalado en la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ), que regula que España pueda investigar genocidio, terrorismo y delitos contra las personas cometidos en conflictos armados, bien se sucedan en su territorio o fuera de él.
"En este caso concreto", señaló Andreu en su auto, "nos encontramos ante un ataque armado dirigido, según se desprende de los hechos relatados en la querella, para acabar con la vida de una persona presuntamente perteneciente a una organización terrorista conocida como Hamás".
Posteriormente, Andreu decidió continuar con el proceso tras examinar la documentación facilitada por el Estado de Israel, de la que se desprendía a su juicio que no hubo investigación judicial sobre el ataque.
El magistrado recibió una traducción no oficial, elaborada por la Embajada de Israel en España, de la documentación -unos 300 folios redactados en inglés y hebreo- que le fue remitida el 30 de enero, cinco meses después de que el juez Andreu la solicitara.