Manuel Chaves, el eterno presidente de Andalucía
- Desde 1990 ha sido elegido en seis ocasiones presidente de Andalucía
- Es amigo personal de Felipe González y fue su ministro de Trabajo desde 1986 a 1990
- Es, junto a Juan Carlos Rodríguez Ibarra, uno de los barones del PSOE
- Fue llamado a dirigir la gestora del PSOE tras la dimisión de Almunia en 2000
En junio iba a cumplir 19 años al frente de la Junta de Andalucía. Manuel Chaves González, el que ha sido el presidente autonómico más longevo de España -tres años más que los que estuvo Manuel Fraga al frente de la Xunta-, vuelve ahora al Gobierno central, donde ya ejerció como ministro con Felipe González.
Chaves acude a la llamada del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que crea para él una tercera Vicepresidencia, la de Autonomías del Gobierno, además de asumir la cartera de Administraciones Públicas, sustituyendo a Elena Salgado, que pasará a ser ministra de Economía.
Zapatero cuenta así con un hombre de partido. Presidente del PSOE nacional desde 2000 y secretario general del PSOE-A desde 1994, Chaves es uno de los barones socialistas y uno de los pocos de la antigua escuela de González y Alfonso Guerra -la generación de 'la foto de la tortilla'- que sigue en primera línea de la política.
Amigo de González
Chaves nació en Ceuta el 7 de julio de 1945 de padre militar, aunque luego estudió bachillerato en Cádiz y Utrera. Fue en la Facultad de Derecho de Sevilla donde conoció a los que se convertirían en sus compañeros de partido.
Tras compartir estudios con el que fuera primer presidente socialista -desde 1982 a 1996-, Felipe González, colaboró con él en su despacho laboralista de Sevilla y cultivarían una amistad que aún perdura.
En 1968, aún en la clandestinidad durante el Franquismo, se sacó el carné del PSOE y de la UGT, sindicato en el que ocupó desde 1976 y durante una década cargos en la ejecutiva confederal. De 1977 a 1990 fue diputado del PSOE por Cádiz.
De sindicalista a ministro de Trabajo
Chaves pasaría del sindicato al otro lado de la trinchera, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, donde le colocó su amigo González en su segunda legislatura, desde 1986 a abril de 1990, cuando dejó el cargo para presentarse por primera vez a la Presidencia de la Junta de Andalucía.
Y desde ese lado de la mesa del despacho, y tras años de lucha sindical, Chaves se convertiría en uno de los objetivos de la primera huelga general de la democracia, la del 14 de diciembre de 1988. La huelga se convocó contra una reforma en el mercado laboral para abaratar el despido e introducir los contratos temporales para jóvenes y fue promovida por CCOO y UGT, que dirigía Nicolás Redondo, quien fuera compañero de filas sindicales de Chaves.
Aparte de las contestaciones sociales, como ministro intentó modernizar la Seguridad Social mediante una gestión más eficaz.
Seis victorias en Andalucía
En su primera candidatura a la Junta de Andalucía, ganó las elecciones autonómicas del 23 de junio de 1990 y sustituyó en la Presidencia andaluza a Rodríguez de la Borbolla, el 26 de julio. Por seis ocasiones Chaves ha sido elegido presidente andaluz.
Llegó al gobierno autonómico en plena explosión económica y enfocó su trabajo en la creación de empleo teniendo el consenso con las demás fuerzas políticas, sindicales y empresariales como referencia. Aunque en los 90 la economía andaluza creció por encima de la media nacional y europea, la tasa de paro siguió creciendo en Andalucía durante su primera legislatura.
En 1994, Chaves pierde la mayoría absoluta y gana las elecciones de junio por mayoría simple. Pasó su peor época como presidente andaluz, a consecuencia de lo que se vino en denominar 'la pinza' ejercida por PP e IU en la oposición.
Tan es así que, tras dos años sin conseguir aprobar unos presupuestos para la Comunidad, el 22 de noviembre de 1995 disolvió el Parlamento autonómico y anunció elecciones anticipadas, utilizando, por primera vez, la facultad que otorga al Presidente la legislación autonómica.
En 2000 ganó por mayoría simple y pactó con los andalucistas; pero en 2004 recuperó la mayoría absoluta, que repetiría en 2008, cuando se inició la última y presente legislatura.
El organizador del PSOE
Las elecciones autonómicas de 2000 coincidieron con las generales, elecciones en las que el PSOE obtuvo los peores resultados de su historia a nivel nacional, lo que provocó la dimisión del secretario general y candidato a la Presidencia del Gobierno, Joaquín Almunia.
Chaves, que ya consiguió normalizar el partido en 1997 al cerrar el enfrentamiento entre 'guerristas' y 'renovadores', fue llamado otra vez para poner orden en el PSOE. El Comité Federal designó a Chaves, cabeza de la Comisión Gestora que dirigió el partido hasta el 35 Congreso de julio de 2000, congreso que eligió a José Luis Rodríguez Zapatero, nuevo secretario general y a él, presidente de los socialistas.
Zapatero se lleva ahora a Madrid a este bético, aficionado al cine y a la lectura, para encomendarle la relación con las autonomías en la España de las reformas estatutarias -algunas de ellas ya aprobadas, entre ellas la propia andaluza y la catalana-.
Aunque estas funciones de relaciones con las autonomías ya estaban incluidas en la cartera de Adminstraciones Públicas, que también asume, el presidente del Gobierno pretende darle más importancia al mapa autonómico español. Zapatero coloca ahí a uno de los nombres propios del socialismo, del que ha recibido críticas precisamente a cuenta del Estatuto catalán, aunque menos vehementes que las de Ibarra.
A punto de cumplir los 64 años, casado con dos hijos y un nieto, Manuel Chaves vuelve a la arena política nacional cuando en los foros políticos andaluces se ponía en duda que volviera a presentarse a la reelección en 2012.