Buteflika: el incansable corredor de fondo de la política argelina

• Comandante en la guerra, Buteflika fue ya ministro en el gobierno de la independencia
• Pertenece al influyente clan de Oujda, la ciudad marroquí donde nació en 1937
• Fue durante décadas la cara de la diplomacia argelina y estuvo al margen en la guerra civil
• Llegó a la presidencia en 1999 como candidato único y concedió una amnistía general

Abdelaziz Buteflika afronta un tercer mandato en la presidencia argelina tras una carrera política de casi medio siglo, que comenzó como ministro nada más proclamarse la independencia del país en 1962 cuando apenas contaba 25 años. Ahora, con 72 recién cumplidos, aspira a cinco años más en poder, al que llegó en 1999.

Buteflika nació el 2 de marzo de 1937 en Oujda (Marruecos) en el seno de una familia de inmigrantes argelinos originaria de Tlemcen, en el oeste del país. Durante la guerra de independencia contra Francia formó parte del llamado clan de Oujda, integrado por combatientes del oeste argelino que pasarían a desempeñar un papel predominante en el futuro del país, como el coronel Huari Bumedian, su principal aliado, y la postre presidente.

A los 19 años se incorporó al Ejército de Liberación Nacional y ascendió a comandante con el nombre de guerra de Si Abdelkader el Mali, gracias a su lucha en el frente sur del Sahel.

Ministro del primer gobierno y diplomático

En el nuevo gobierno de la Argelia independiente, el primer presidente del país, Ahmed Ben Bella, le designó ministro de Juventud, Deportes y Turismo, cargo en el que permaneció hasta 1963 cuando fue nombrado titular de Exteriores.

Bumedian derrocó a Ben Bella en 1965 con el apoyó de Buteflika, a quien nombró miembro del Consejo de la Revolución y mantuvo como ministro de Exteriores durante 14 años.

Durante la década de los setenta presidió la Asamblea General de la ONU, en los tiempos en que Argelia era uno de los líderes del movimiento de países no alineados que apoyaban las luchas de liberación africanas. Buteflika se convirtió esos años en la cara elegante y diplomática del régimen a ojos de Occidente, imagen que seguiría cultivando más tarde durante su presidencia.

Tras la muerte de Bumedian en 1978, era uno de los más firmes candidatos a sucederle junto a los coroneles Mohamed Salah Yahyaui y Chadli Benyedid. La cúpula militar optó, sin embargo, por éste último que le excluyó del Gobierno en 1980 y le despojó de sus cargos políticos tras ser acusado de desviar más de un millón de francos suizos del tesoro público, acusación que no llegó a demostrarse.

Candidato único

Buteflika se exilió en Europa y no regresó a Argelia hasta seis años más tarde para incorporarse al Comité Central del partido único, el Frente de Liberación Nacional (FLN). Cuando se anularon las legislativas de 1992 que iban a dar el poder a los islamistas y estalló el conflicto armado, rechazó el ofrecimiento del Ejército para ejercer la presidencia y se mantuvo alejado de la política durante esa década negra.

Sí se presentó a las presidenciales de 1999 con el apoyo de la cúpula militar, el FLN y los islamistas moderados y consiguió el 73,8% de los votos después de que sus seis oponentes se retirasen en pleno tras denunciar que la elección se había manipulado para garantizar su victoria.

Desde entonces Buteflika ha tratado de distanciarse de la imagen de presidente designado y manejado por los militares y se ha centrado en lo que llama su política de "reconciliación nacional", basada en medidas de amnistía para los islamistas que abandonan las armas y para los crímenes atribuidos a las fuerzas gubernamentales. En el 2004 se enfrentó en las elecciones a su ex primer ministro, Ali Benflis, pero volvió a ganarlas con un el apoyo del 83,5% de los votos.

A pesar de las críticas sobre su política social y económica y de los reproche de olvido por parte de las víctimas de la guerra civil, Buteflika se ha ganado el apoyo de una gran parte de la población argelina, que le atribuye la reducción de la violencia experimentada durante su mandato.

Pese a las especulaciones sobre sus problemas de salud --en el 2005 tuvo que ser hospitalizado de urgencia en Francia por una úlcera de estómago sangrante-- se ha recorrido el país de punta a punta durante esta campaña y ha demostrado albergar la resistencia de un corredor de fondo.