Indultan a la madre que pegó a su hijo una bofetada por no hacer los deberes
- La habían condenado a separarse de su hijo durante más de un año y a 45 días de cárcel
- Con el indulto del Gobierno no cumplirá la pena de alejamiento, si no comete más delitos
- Los indultos suelen tardar en llegar más de un año, este se ha hecho en 72 días
El Consejo de Ministros ha concedido el indulto a María Saliente Alonso, la mujer que dio un bofetón y agarró por el cuello a su hijo de 10 años en una discusión.
La acusada fue condenada por el juzgado de lo Penal número 3 de Jaén, a 45 días de cárcel y a no acercarse a su hijo durante más de un año y medio.
Con este perdón, comunicado a través de un telegrama a la Audiencia Provincial de Jaén, la acusada no tendrá que cumplir el alejamiento, siempre y cuando no cometa ningún delito en los próximos dos años. Tampoco irá a la cárcel ya que no tiene antecedentes penales y la condena es inferior a dos años.
El indulto se presentó al Consejo de Ministros con apoyos de todos los sectores posibles. La magistrada Elena Arias Salgado, presidenta de la Sección Segunda y ponente de la sentencia, ha afirmado que separar a madre e hijo "puede producir consecuencias perjudiciales para los dos hijos menores de la acusada".
Ignacio Amor, el abogado de la madre, ha dicho que el indulto es "lo que se esperaba" y ha calificado la condena a la madre como "rarísima". Además espera que con todo este proceso se llegue a modificar la ley para que no se repitan casos como este.
¿Sentencias más duras que una bofetada?
La sentencia generó un nuevo debate social y muchas preguntas, como por ejemplo, si la separación de una madre de su hijo podía hacer más daño al menor que la propia bofetada.
Los hechos tuvieron lugar el 6 octubre de 2006 en Pozo Alcón (Jaén), en una discusión que comenzó tras regañar la acusada a su hijo por no haber hecho los deberes.
Según la sentencia, la madre "cometió un acto de agresión contra su hijo al cogerle del cuello para levantarlo del suelo y darle un tortazo en la cabeza", y que "se cumplen todos los requisitos del tipo de maltrato, aun cuando hubiese sido la única agresión cometida", ya que la agresión hizo que el niño se golpeara la cabeza contra el lavabo y que le sangrara la nariz.
La sentencia también reconocía que el niño tenía un carácter "difícil" y era "desobediente" en el colegio, lo que era motivo de nerviosismo para la madre.
Se trata de un "indulto exprés", ya que habitualmente tarda más de un año y este ha llegado en 76 días desde que la Audiencia hizo pública su condena hasta que el Consejo de Ministros concedió el indulto.