Citigroup vuelve a beneficios y gana 1.590 millones en el primer trimestre

• Los datos suponen su primer beneficio neto en 18 meses
• En los últimos meses ha reducido su plantilla en 13.000 personas
• Las cifras son un incremento del 99% con respecto al primer trimestre de 2008
• También General Electric ha publicado un beneficio mejor de esperado

El banco estadounidense Citigroup ha anunciado este viernes que cerró el primer trimestre de 2009 con su primer beneficio neto en 18 meses, que fue de 1.590 millones de dólares (1223 millones de euros) ayudado por la mejora de las operaciones en el negocio de banca de inversión.

También General Electric ha publicado este viernes unos resultados mejores de lo esperado, aunque sus beneficios descendieron un 35% respecto al primer trimestre del pasado año.

"Nuestros resultados reflejan la fortaleza de Citi. Con ingresos cercanos a los 25.000 millones de dólares y beneficios netos de 1.600 millones, tenemos el mejor resultado desde el segundo trimestre de 2007", ha asegurado el consejero delegado de Citigroup, Vikram Pandit, mediante un comunicado de prensa.

Esta entidad, que en los últimos meses ha reducido su plantilla en 13.000 personas, registró un beneficio neto de 1.590 millones de dólares en el primer trimestre, frente a unas pérdidas netas de 5.110 millones en el mismo período del año anterior.

Citi, que a principios de marzo ya adelantó que había sido rentable en los dos primeros meses de 2009, indicó que ha aumentado sus reservas para pérdidas por préstamos y consiguió casi duplicar sus ingresos y situarlos en 24.790 millones de dólares (unos 19.000 millones de euros), debido a una menor depreciación de activos.

La entidad estadounidense, fuertemente afectada por la crisis financiera desde hace varios meses, indicó también que sus ingresos de enero a marzo "suponen un incremento del 99% comparados con los del primer trimestre de 2008" y se derivan de una mejora en todas las regiones del país en las que está implantado.

Citigroup se une así a los bancos que en las últimas dos semanas han anunciado una recuperación de sus cuentas, como ya han hecho Wells Fargo, Goldman Sachs y JP Morgan Chase, y según los expertos es una señal de que el sector podría empezar a ver la luz al final del túnel.

Escepticismo

Sin embargo, los mercados mantienen cierto escepticismo ante la rápida recuperación de los bancos, y temen que las cifras estén abultadas artificialmente por cambios contables recientemente aprobados y por las multimillonarias inyecciones de capital público recibido para tapar los agujeros creados por instrumentos de deuda que se han tornado irrecuperables.

También favorecen la sensación de recuperación bancaria los bajos tipos de interés vigentes y la comparación con los desastrosos resultados del año pasado.

Los ingresos de la unidad de tarjetas de crédito de Citigroup cayeron un 10%, lo que da cuenta de que el consumo privado sigue cayendo, al tiempo que continúan los impagos de hipotecas y de otros tipos préstamos en Estados Unidos.

General Electric, mejor de lo esperado

Aunque fueron mejores de lo esperado por los analistas, los resultados publicados por General Electric, con presencia en prácticamente todos los grandes sectores de la economía estadounidense, también reflejaron claramente que la economía del país sigue sufriendo serios problemas.

El conglomerado industrial -que es el décimo mayor del mundo según el índice FT Global 500- ganó 2.896 millones en el primer trimestre, lo que supone un descenso del 35% respecto al mismo periodo del año anterior, y facturó 38.400 millones, lo que implica una caída del 9%.

Además, las ganancias de su brazo financiero cayeron el 58% y las de la unidad de consumo se redujeron el 75%.

Algo parecido ocurrió con Mattel, la mayor juguetera del mundo, que también informó de que en el primer trimestre del año perdió 51 millones de dólares, un 9,4% más que un año antes, al tiempo que sus ingresos cayeron el 15% hasta los 785 millones de dólares.

Sin embargo, la cautela a la que obligan las noticias que llegan desde el ámbito empresarial y que dan cuenta de que ni el consumo ni el mercado inmobiliario están en vías de recuperarse, no eclipsó este viernes el optimismo que desde hace semanas insufla el sector financiero.

Ello permitió que la Bolsa de Nueva York se mantuviera en su última sesión de la semana en territorio positivo y camino de completar su sexta semana consecutiva de subidas, aunque en lo que va de año acumula un descenso cercano al 7%.