La Comisión Europea investigará a Iberia porque sus rutas a EE.UU. pueden restringir la competencia

• Estudiará sus rutas desde la UE a EE.UU. junto a American Airlines y British Airways
• Las tres compañías aeronáuticas están integradas en la alianza Oneworld
• La Comisión investigará también a las compañías que integran la alianza Star Alliance

La Comisión Europea investigará a Iberia, American Airlines y British Airways ante la posibilidad de que sus actividades conjuntas en rutas transatlánticas, dentro de la alianza Oneworld, supongan una restricción de la competencia.

El Ejecutivo comunitario investigará si las operaciones de estas compañías en sus rutas entre la Unión Europea (UE) y EEUU pueden suponer una posición dominante en el mercado, según ha anunciado la Comisión Europea en un comunicado.

La Comisión ha abierto otro procedimiento de investigación por el mismo motivo a las compañías Air Canada, Continental, Lufthansa y United, integradas en la alianza Star Alliance.

Las compañías podrán remitir toda la información que deseen para demostrar que respetan las normas vigentes.

La CE estudiará los acuerdos entre todas estas compañías para ofrecer servicios conjuntos en los ámbitos comercial, de mercadotecnia y de transporte, principalmente para las rutas intercontinentales.

El nivel de cooperación en estos campos "parece mucho más amplio que el habitual entre las citadas aerolíneas y otras dentro de Star Alliance y Oneworld", ha afirmado la Comisión.

Gestión conjunta de horarios y precios

En particular, la Comisión Europea investigará si las compañías tratan de gestionar de forma conjunta los horarios, la capacidad, los precios, la venta de los billetes y los ingresos en las citadas rutas.

El Ejecutivo comunitario estudiará si estas actividades pueden perjudicar a la competencia en el mercado del transporte aéreo, y en su análisis tendrá en cuenta si la cooperación "conlleva algún tipo de beneficios para los consumidores".

No obstante, la Comisión ha recalcado que la apertura del procedimiento formal de investigación no implica la existencia de ninguna prueba de infracción de la normativa comunitaria.

Bruselas no ha fijado ningún plazo para la finalización del proceso de investigación, y ha señalado que su duración dependerá de factores como la complejidad de cada caso, el nivel de colaboración de las compañías aéreas y su presentación de argumentos.