¿Ha muerto el Nuevo Laborismo británico?
- Gordon Brown ha subido hasta el 50% el impuesto sobre la renta de los más ricos
- Esta medida incumple el compromiso continuado de los laboristas de no subir el IRPF
- Brown, firmante del manifiesto del Nuevo Laborismo, dice que no lo ha traicionado
- "Reino Unido está luchando contra una recesión mundial y debe tomar acciones valientes"
"El mito de que la solución a cada problema es aumentar el gasto público se ha desvanecido". "La imposición fiscal no es neutral en el sentido de que aumenta los beneficios. Cómo y lo que los gobiernos tasan envía una clara señal sobre qué actividades deberían ser fomentadas". "El Nuevo Laborismo establecerá una nueva confianza en los ciudadanos británicos sobre el sistema fiscal y mantendremos esta promesa".
Con estas palabras recogidas en el manifiesto del Nuevo Laborismo, Tony Blair hace doce años quiso desmarcarse de toda una corriente del viejo laborismo británico: que a la hora de la verdad su paso por el gobierno suponía más impuestos para los más ricos siguiendo una dinámica de lucha de clases.
Subida polémica
Ahora, su sucesor y uno de los inspiradores de ese mismo manifiesto, Gordon Brown, ha decidido aumentar el impuesto sobre la renta hasta el 50% a los ciudadanos británicos que ganen al año más de 150.000 libras (unos 167.000 euros) como elemento clave para compensar en el presupuesto la caída de la actividad económica como consecuencia de la crisis.
"Tenemos que aceptar que si vamos a darle a la gente las oportunidades que necesita para el futuro, será necesaria una contribución por parte de aquellos que ganan más y quiénes han ganado más en los últimos años", ha declarado Brown de forma solemne.
Pero lo cierto es que el aumento del 45 al 50% en el impuesto de la renta a estas fortunas que se recoge en su anteproyecto de presupuestos -y que no se aplicará hasta abril de 2010- supone en la práctica un incumplimiento del manifiesto de las elecciones de 2006, en la que los laboristas declaraban que no elevarían esta tasa en la siguiente legislatura.
"Esto no es mayor imposición por nuestro propio beneficio, son impuestos por un fin justo. Reino Unido está luchando contra una recesión internacional, por lo que tienen que tomar acciones valientes para recuperarse", ha añadido el primer ministro.
Críticas de la oposición
Sin embargo, la oposición conservadora ya ha arremetido contra el gobierno por incumplir el compromiso de su partido, acusando a los laboristas de presentar un presupuesto que es pura "fantasía" por hacer creer que los problemas de endeudamiento del país se pueden resolver con impuestos a los más ricos.
Mientras el propio Brown ha tratado de apelar más al espíritu que a la letra del Nuevo Laborismo.
"El Nuevo Laborismo va de dar a la gente nuevas oportunidades, estamos ayudando a la gente a la gente a sacar lo mejor de su potencial. De eso va el Nuevo Laborismo", ha recalcado.