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Benedicto XVI pide nuevos "esfuerzos" para promover la paz en Irak

  • El Papa pide que se garantice el "derecho a la pacífica coexistencia" de los cristianos iraquíes
  • Benedicto XVI visita la Mezquita Mayor de Ammán, la capital del país
  • Antes ha visitado el Monte Nebo, desde el que el profeta Moisés vió la Tierra Prometida

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El Papa pide nuevos esfuerzos para la paz en Irak

Benedicto XVI ha pedido a la comunidad internacional nuevos "esfuerzos" para promover la paz y la reconciliación en Irak y ha dicho a los mandatarios iraquíes que "hagan todo lo posible" para garantizar a los cristianos de ese país "el derecho a la pacífica coexistencia".

El Papa ha hecho el llamamiento en el discurso que ha pronunciado en el exterior de la mezquita Al Husein Bin Tallal, de Ammán, ante los jefes religiosos musulmanes y el cuerpo diplomático.

Al acto ha asistido el patriarca caldeo de Badgad, el cardenal Emmanuel III Delly. Tras saludarle "muy calurosamente", el Papa ha recordado que Jordania ha acogido a miles de refugiados iraquíes y que la presencia del líder religioso caldeo traía a la mente la situación de Irak.

"Los esfuerzos de la comunidad internacional para promover la paz y la reconciliación, junto con los de los líderes locales, deben continuar para dar fruto en la vida de los iraquíes. 

Expreso mi aprecio por todos los que se esfuerzan para devolver la confianza, reconstruir las instituciones y las infraestructuras esenciales para el bien de esa sociedad", ha afirmado el Papa.

Preocupación por los cristianos en Irak

Benedicto XVI, que en numerosas ocasiones ha expresado su preocupación por la situación de los cristianos en Irak, donde son minoría, ha aprovechado la ocasión para pedir a la comunidad internacional y a los dirigentes locales "que garanticen a la antigua comunidad cristiana el fundamental derecho a la pacífica coexistencia con sus conciudadanos".

Los cristianos iraquíes, cuyas raíces son muy antiguas hasta el punto de que se definen como "hijos de Santo Tomás", son unos 800.000, casi el 3% de la población de Irak.

La mayoría -unos 600.000- es católica de rito oriental y pertenece a la Iglesia caldea.

La sede del Patriarcado está en Bagdad, donde vive la comunidad más numerosa de estos católicos, unos 350.000.

Los caldeos, que celebran todavía sus ritos en arameo, tienen como patriarca a Emmanuel III Delly, que fue elegido el 4 de diciembre de 2003. Delly fue nombrado cardenal por Benedicto XVI en el consistorio que celebró en noviembre de 2007.

Desde el comienzo de la guerra, según datos oficiales iraquíes, 172 cristianos han muerto y 1.752 familias cristianas se han visto desplazadas por la violencia.

Entre los muertos se encuentran varios sacerdotes y obispos caldeos. Numerosas iglesias fueron tiroteadas en varias ciudades de Irak y el arzobispo de Kirkuk (Irak), Louis Sako, ha denunciado varias veces el clima de persecución que viven los cristianos en ese país. 

Visita al Monte Nebo

Antes ha seguido los pasos del profeta Moisés en la montaña en la que la Biblia afirma que el antiguo profeta vislumbró la Tierra Prometida antes de morir, y ha predicado que la religión ayuda al hombre en su búsqueda de la verdad.

Desde lo alto del Monte Nebo, el pontífice de 82 años ha contemplado el río Jordán desde Jericó y las colinas de Jerusalén, con el Mar Muerto perdido entre una neblina al final del horizonte.

"Como Moisés, nosotros también hemos sido llamados por nuestro nombre, invitados a emprender un éxodo diario desde el pecado y la esclavitud hacia la vida y la libertad", ha dicho en la iglesia consagrada al Profeta Moisés, construida en el siglo VI.

"Su ejemplo nos recuerda que nosotros también somos parte del eterno peregrinar del pueblo de Dios a lo largo de la historia".

La visita del Papa, presentada como una peregrinación pontificia a Tierra Santa, es también una visita de Estado a Jordania, Israel y Palestina, que tiene como objetivo equilibrar las relaciones de la Santa Sede con judíos y árabes y reparar la imagen del Vaticano en el mundo musulmán.