Néstor Kirchner presenta su candidatura para las elecciones legislativas de junio

• Encabezará la lista de candidatos a diputados en la provincia de Buenos Aires
• Estará al frente de la lista junto con Daniel Scioli y la actriz Nacha Guevara
• Se renovará la mitad de los 257 escaños de diputados y un tercio de los 72 del Senado

El ex presidente argentino Néstor Kirchner será uno de los candidatos del oficialismo peronista en las elecciones legislativas del próximo 28 de junio , según han informado este sábado fuentes de su partido, dos horas antes de vencer el plazo legal para la presentación de listas de postulantes.

Kirchner, antecesor y esposo de la mandataria argentina, Cristina Fernández, encabezará la lista de candidatos a diputados del peronista Frente para la Victoria en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país.

Néstor Kirchner hace así un intento de reforzar la tendencia izquierdista del partido gobernante cuya popularidad se ha hundido debido a los problemas económicos y fiscales de una prolongada guerra con los agricultores, según han informado los medios de comunicación de Argentina este sábado

El gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, va a ocupar el segundo lugar de la lista encabezada por el ex mandatario, seguido por la actriz Nacha Guevara, el jefe del gabinete de ministros ,Sergio Massa, el diputado Héctor Recalde y la diputada Diana Conti. 

Los portavoces del Frente para la Victoria han presentado las listas de candidatos oficialistas cuando el plazo para hacerlo vencía a las 24 horas locales (03.00 GMT de este domingo).

Scioli y Massa han dicho que permanecerán en sus cargos después de las elecciones del 28 de junio próximo, porque sus candidaturas son "testimoniales", en apoyo "al modelo" del Gobierno de Cristina Fernández, esposa y sucesora de Kirchner (2003-2007).

Ventaja para el Frente de la Victoria

La oposición, formada por alianzas de conservadores con peronistas disidentes por un lado, y de la Unión Cívica Radical, la Coalición Cívica y socialistas, por otro, aspiran a desplazar al Frente para la Victoria de la mayoría que tiene actualmente en el Parlamento.

En los próximos comicios se renovará la mitad de los 257 escaños de diputados y un tercio de los 72 del Senado, además de legislaturas provinciales y municipales.

Alrededor de la mitad de los escaños que se renuevan en el Parlamento están en manos del Frente para la Victoria, que tiene la mayoría en ambas cámaras debido al buen resultado que obtuvo en los comicios del 2005.

En la provincia de Buenos Aires, los sondeos preliminares dan una ventaja de por lo menos cinco puntos al Frente para la Victoria, gracias al apoyo que recibe el oficialismo en el populoso cordón urbano que rodea a la capital argentina.

Para irritación de la oposición, Kirchner ha impulsado y logrado las candidaturas "testimoniales" de unos 40 de los 92 alcaldes de populosos distritos bonaerenses que responden el Frente para la Victoria, según fuentes peronistas.

El Acuerdo Cívico y Social ha logrado este viernes que seguidores del vicepresidente argentino, Julio Cobos, enfrentado con Fernández desde hace más de un año, se sumen a sus listas de candidatos en la provincia de Buenos Aires, bastión del Frente para la Victoria.

También se han resuelto las disputas internas en la alianza de la conservadora Propuesta Republicana (Pro) con peronistas disidentes en la capital argentina, cuarto distrito electoral más importante del país, y en la provincia de Buenos Aires.

Los analistas consideran que el Frente para la Victoria puede compensar la pérdida de votos en otros grandes distritos y mantenerse como primera minoría parlamentaria, aunque sin la mayoría que ahora tiene en el Senado y en la Cámara de Diputados. 

Enfrentar los problemas que vive Argentina

En las últimas apariciones públicas, Néstor Kirchner advirtió a los votantes que si no apoyan al partido gobernante, Argentina podría volver al caos económico que vivió en el año 2001-2002, cuando se congelaron los depósitos bancarios y la moneda se devaluó. 

La oposición ha acusado a Cristina Fernández de adelantar las elecciones, previstas inicialmente para el mes de octubre, a fin de que se produzca antes de una desaceleración económica relacionada con la recesión mundial que afecte al apoyo a su gobierno. 

Su marido había ganado la aprobación durante su mandato en 2003-2006, cuando dirigió una recuperación económica, pero ahora su esposa Cristina Fernández, tiene que combatir con una elevada inflación, una revuelta por parte de los agricultores, la crisis de financiación y las denuncias de altos niveles de delincuencia que existen en Argentina.