José María Aznar augura "un gran futuro" a Alberto Ruiz-Gallardón dentro del PP

• El ex presidente también desea "un gran éxito" a Mariano Rajoy
• Aznar considera que el líder popular está manejando bien el caso Gürtel
• A su juicio, Zapatero debería asumir responsabilidades por la crisis
• Opina que el gasto público es "desmesurado" y que hacen falta reformas

José María Aznar escucha a un ponente durante una conferencia.

El ex presidente del Gobierno José María Aznar ha augurado un "gran futuro" por delante a Alberto Ruiz-Gallardón, al ser preguntado por su posible nombramiento como secretario general del PP aunque ha matizado que las decisiones internas corresponden al actual líder del partido.

  

Aznar ha deseado un "gran éxito" a Mariano Rajoy, en quien dice tener "confianza plena", y defiende que "lo está haciendo bien" en relación con el 'caso Gürtel'. 

"Sabe lo que tiene que hacer y estoy convencido de que lo está haciendo bien" ha indicado Aznar en referencia a la presunta trama de corrupción que afecta a varios miembros del PP. 

Sobre el papel de Rajoy al frente de los populares afirma estar seguro de que "va a ser un buen presidente del Gobierno de España".

En declaraciones a Onda Cero, Aznar  insta al actual jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, a asumir su "responsabilidad" en materia económica e insiste en que "recibió el país más próspero de la historia de España y va camino de batir el récord de ser el presidente que deja a España en la situación económica más problemática". 

Aznar apostilla que "de un presidente del Gobierno hay que esperar que después de cinco años, además de dar mítines, aporte alguna idea razonable".

Demasiado gasto público

Entre los factores que, a su juicio, contribuyen a que  España tenga una "crisis mayor" que la del resto de Europa, el ex presidente cita un gasto público "desmesurado" o la falta de reformas fiscales, laborales y energéticas. 

Además, critica que el país ha levantando una serie de barreras internas en el marcado nacional que "lastran" su competitividad y defiende que la "salida" no es un mayor intervencionismo sino la "mejora de los mecanismos de control".

Preguntado si la sustitución de Pedro Solbes por Elena Salgado ayuda a salir de la crisis económica, responde: "Con todos los respetos a las personas, me parece irrelevante".

Critica que en los últimos cuatro años el gasto público ha crecido "un 30%", lo que califica como "un ritmo inasumible", y agrega que no se trata de que la gente reciba subsidios sino que exista una menor tasa de desempleo.

Por último, ha defendido la gestión económica durante su mandato y ha criticado que se  "respondiera" con la huelga general de 2002, a su juicio era "una huelga política y absolutamente innecesaria".

Sobre su último libro España puede salir de su crisis, sostiene que fue escrito "en clave sincera y optimista" y añade que ahora aparece en los medios de comunicación para promocionarlo pero que, sino fuera por esta presentación, procura "aparecer poco" en los medios.