Obama restablecerá los tribunales militares para algunos presuntos terroristas
- Los presos de Guantánamo tendrían nuevas protecciones legales
- Los detenidos tendrán más derechos que los que tuvieron bajo el mandato anterior
- La Cámara de Representantes ha ordenado que se entregue un plan "exhaustivo"
El presidente de EE.UU., Barack Obama, anunciará este viernes que planea restablecer los tribunales militares de la era de Bush para algunos de los presuntos terroristas detenidos en la base de su país en Guantánamo, aunque éstos tendrían nuevas protecciones legales, según ha informado una fuente del Gobierno.
La fuente, que ha pedido el anonimato, ha confirmado informes de medios locales de que Obama anunciará una serie de cambios respecto a los nuevos tribunales militares, establecidos bajo la presidencia de Bush para enjuiciar a presuntos terroristas.
Fuentes de la Casa Blanca no se han pronunciado públicamente al respecto, pero han recordado que el Gobierno de Obama ha estado revisando el asunto de qué hacer con los 241 detenidos que permanecen en Guantánamo desde que el presidente ordenó su cierre.
Algunos medios han indicado que el número de detenidos que estarían sometidos a los tribunales militares oscila entre 10 y 20.
Pocas horas después de su investidura, Obama suspendió los tribunales militares y ordenó, mediante una orden ejecutiva, el cierre del penal en Guantánamo para el 22 de enero de 2010.
Los detenidos tendrán más derechos
Se prevé que, entre otros elementos, la orden ejecutiva que emitirá Obama restringirá las pruebas "oídas" a terceras personas y que se pueden utilizar en los tribunales en contra de los detenidos.
Tampoco se permitirá el uso de pruebas obtenidas mediante métodos coercitivos, incluyendo la asfixia simulada.
Además, los detenidos tendrán más libertad de escoger a sus abogados militares y los que se nieguen a dar testimonio tendrán la protección de posibles sanciones legales.
Según The New York Times, bajo los nuevos tribunales, los detenidos tendrán más derechos que los que tuvieron bajo el mandato del anterior presidente, George W. Bush (2001-2009), pero "no tendrán toda la gama de protecciones legales que tienen los acusados en tribunales civiles".
Las cortes militares fueron establecidas para enjuiciar a presuntos terroristas detenidos en el campo de batalla en Afganistán en 2001, pero han causado la repulsa de los defensores de los derechos humanos y han sido objeto de diversas demandas.
Apoyo republicano
El senador republicano por Carolina del Sur, Lindsey Graham, ha dicho en un comunicado que la decisión de Obama, de producirse, marcará un paso hacia la mejora y fortalecimiento de las políticas en torno a los detenidos en Guantánamo.
"Estoy de acuerdo con el presidente y con nuestros comandantes militares de que es hora de que comencemos de nuevo y fortalezcamos nuestras políticas de detenciones. Aplaudo las acciones del presidente hoy", ha agregado Graham, uno de los congresistas que estudia el tema con la Casa Blanca.
La decisión de Obama coincide con los reproches que le hacen los grupos de izquierda por haberse negado a divulgar más fotos relacionadas con la tortura de prisioneros en Irak y Afganistán.
Plan "exhaustivo" sobre el cierre de Guantánamo
Como senador, Obama se opuso en 2006 a la creación de los tribunales o comisiones militares para enjuiciar a los presuntos terroristas y, al igual que muchos demócratas en su momento, argumentó que éstos violaban la Constitución porque limitaban los derechos legales de los prisioneros.
En paralelo, la Cámara de Representantes de EE.UU. ha ordenado que Obama entregue un plan "exhaustivo" sobre el cierre del centro de detenciones en Guantánamo y el traslado de los detenidos que allí permanecen, antes de desembolsar fondos para cerrar esa prisión.
La exigencia fue incluida en un proyecto de ley de gastos de defensa suplementarios de 96.700 millones de dólares que aprobó hoy la Cámara de Representantes para el año fiscal en curso, que termina en septiembre próximo.
También pide que ese plan incluya "los resultados de un análisis sobre el riesgo que suponga para la seguridad nacional el traslado" de cualquiera de los detenidos.
En un claro revés para Obama, la Cámara Baja se negó a aprobar los 80 millones de dólares que solicitó la Casa Blanca para tramitar el cierre del penal en Guantánamo.
La versión de la medida de gastos que aprobó el Comité de Asignaciones del Senado sí incluye los 80 millones de dólares pero prohíbe el traslado de los detenidos de Guantánamo a suelo estadounidense.
Ambas versiones tienen que ser armonizadas en un solo texto antes de enviarlo al Despacho Oval.