Enlaces accesibilidad

Borrego cree que el caso de los piratas somalíes está "entre el sainete y la tragicomedia"

  • El abogado del Estado ante la Audiencia Nacional critica la instrucción
  • Borrego ha señalado que todo el caso "es un poco raro"
  • Defiende la justicia universal pero con limitaciones

Por

El abogado del Estado ante la Audiencia Nacional, Javier Borrego, considera que la instrucción del caso de los piratas somalíes capturados en el Índico por un buque español ha estado "entre el sainete y la tragicomedia".

Entrevistado en Radio Nacional, Borrego ha señalado que todo el caso "es un poco raro" porque el juez decretó prisión provisional en el barco para poner a los piratas a disposición del juez en España.

Más tarde el fiscal ordenó la libertad y el juez "llevó al comandante a pedir disculpas" y además se renunció al recurso del juez.

Borrego también se muestra "sorprendido" porque en el auto se señala que "desembarcar a los piratas no es entregarlos" y las armas, los GPS, se envían "al parecer, al juez español".

Justicia universal

El magistrado se muestra partidario de la justicia universal pero de una forma "coherente y eficaz". Con respecto al texto votado en el Congreso para limitar las actuaciones de los jueces de la Audiencia Nacional en casos de "lesa humanidad", matiza que el texto no será público hasta el martes y espera que incluya una cautela para "no afectar a los procesos en curso".

Entre los casos abiertos está el del juez Santiago Pedraz que quiere sentar en el banquillo a tres militares estadounidenses por la muerte del reportero español José Couso o el del juez Andreu por un bombardeo sobre la franja de Gaza en 2002.

A juicio de Borrego, la política exterior es una competencia "exclusiva" del Ejecutivo y recuerda que el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo no admite la acusación popular para casos de justicia universal, una opción que si es posible en España.

El abogado del Estado también subraya que en el delito de la mutilación genital se puede perseguir siempre que "sus responsables se encuentren en España", algo que desde su punto de vista es "una precisión, no una limitación".

En resumen, aboga la justicia universal para que no haya "impunidad para ciertos delitos horribles" pero insiste en llevarla a la práctica con eficacia y coherencia "si se da ese paso".