Sorolla, el pintor de la luz del Mediterráneo
- Nació en Valencia en 1863 y murió en Madrid con 60 años
- Antes de cumplir 20 años había hecho varias exposicones y le llovían los encargos
- Su obra intenta recoger la luminosidad de su tierra que trasladaba al lienzo
Joaquín Sorolla y Bastida (Valencia, 27 de febrero de 1863 - Cercedilla, 10 de agosto de 1923), pintor y español impresionista, fue uno de los pintores españoles más prolíficos, con más de 4.000 obras.
Sus padres fallecieron cuando tenía dos años.
En 1874 empezó a estudiar en la Escuela Normal Superior donde se apuntó a dibujo.
Comenzó a estudiar la obra de Velázquez y otros autores en el Museo del Prado, etapa Realista, de la que era su profesor Gonzalo Salva.
En 1894 viajó a París donde conocería la pintura impresionista, lo que supuso una verdadera revolución en su estilo. Comenzó a pintar al aire libre, dejándose invadir por la luz y el color del Mediterráneo.
Fama internacional
Su fama rebasó las fronteras españolas para extenderse por toda Europa y Estados Unidos
En noviembre de 1911, firmó un encargo para la Hispanic Society of America por el que realizaría catorce murales que decorarían las salas de la institución.
Con esta obra, realizada entre 1913 y 1919 y de tres metros y medio de alto por setenta metros de largo, alzó un imborrable monumento a España, pues en ella se representaban escenas características de diversas provincias tanto españolas como portuguesas.
Cuando terminó los trabajos para la Hispanic Society, trabajó como profesor de composición y color en la Escuela de Bellas Artes de Madrid.
En 1920, mientras pintaba el retrato de la señora Pérez de Ayala en el jardín de su casa en Madrid, padeció un ataque de hemiplejía que mermó drásticamente sus facultades físicas y mentales. Murió en su casa de Cercedilla el 10 de agosto de 1923.
Uno de sus mayores deseos fue siempre poder exponer sus obras en el Museo del Prado. Un deseo que desde el martes 26 de mayo se hará realidad.