El transbordador espacial Atlantis aterriza por fin en California tras dos días de retrasos
- El mal tiempo cerca del centro espacial Kennedy ha obligado a cambiar el destino
- Su llegada a la base Edwards supone un coste extra de casi dos millones de dólares
- El transbordador espacial vuelve tras reparar el telescopio espacial Hubble
Después de tres días de retrasos, el Atlantis ya está en casa. El transbordador espacial ha aterrizado en la base Edwards, en California, después de tres días de retrasos por el mal tiempo en el entorno del centro espacial Kennedy de Florida, donde estaba prevista su llegada el viernes.
La nave ha tomado tierra tras una misión de 13 días en la que ha reparado el telescopio espacial Hubble.
Ante la presencia continua de tormentas en el cielo de Florida, la agencia espacial ha retrasado en varias ocasiones la vuelta a la Tierra del transbordador, al que ha decidido mantener en órbita a la espera de una mejora meteorológica.
Este mismo domingo ha abortado un primer intento de aterrizaje programado a las 14:09 GMT y, finalmente, ha decidido trasladar la operación a California, donde ha habilitado una base alternativa.
Sin embargo, el aterrizaje en California supondrá para la NASA un coste de 1,8 millones de dólares y le obligará a trasladar al Atlantis hasta Cabo Cañaveral sobre las espaldas de un Boeing 747.
Objetivo cumplido
Los astronautas del Atlantis regresan a la Tierra después de reparar y equipar el Telescopio Espacial Hubble, con lo que han alargado su vida útil.
El Hubble cuenta ahora con instrumentos de vanguardia y repuestos nuevos, lo que permitirá el envío de imágenes espaciales de mucha mayor calidad en los próximos cinco años, antes de que el nuevo telescopio de la NASA, el James Webb, lo sustituya definitivamente.
La tripulación del Atlantis ha pasado más de 36 horas en el espacio para instalar la nueva equipación, entre la que se encuentra una cámara pancromática de amplio espectro, capaz de captar objetos formados apenas 500 millones de años después de la explosión del Big Bang.
"El Hubble ha vuelto a su estatus de buque insignia. Ahora tiene un arsenal completo de instrumentos y herramientas para que los astrónomos hagan nuevos descubrimientos", ha asegurado Jon Morse, astrofísico jefe de la NASA.