Cañizares afirma que "no es comparable" el aborto a los abusos sexuales de sacerdores en Irlanda

• El cardenal dice que los abusos afectan a "unos pocos colegios" católicos irlandeses
• Con el aborto "más de 40 millones de seres humanos se han destruido legalmente"
• La ministra de Sanidad considera sus declaraciones "irresponsables e inoportunas"

El cardenal prefecto de la Congregación por el Culto Divino, Antonio Cañizares, considera que "no es comparable" el caso de los abusos a menores en escuelas católicas irlandesas entre los años 50 y 80 con el aborto, porque el primero afecta a "unos cuantos colegios" y el segundo supone que "más de 40 millones de seres humanos se han destruido legalmente".

Sobre los abusos sexuales de sacerdotes católicos, sostiene que estas conductas son "totalmente condenables" y hay que pedir perdón.

En una entrevista en TV3, Cañizares señala que la reforma de la ley del aborto del Gobierno tiene como punto de referencia el desconocimiento de la verdad del hombre y de los derechos humanos.

En su opinión, cuando un gobierno pretende legislar con un proyecto como este, está "debilitando los cimientos de una misma sociedad".

Remarca que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero pretende llevar a cabo un cambio social y cultural muy grande, "hacer una sociedad y una cultura totalmente nuevas".

En cuanto a las polémicas declaraciones del Papa sobre el uso del preservativo en Africa para combatir el Sida, comparte las tesis de Benedicto XVI porque, opina que los preservativos no son la solución a la enfermedad, y considera que hace falta más educación sobre la sexualidad, el matrimonio y la familia.

"Irresponsables e inoportunas"

La ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, califica de "absolutamente irresponsables e inoportunas" las declaraciones de Cañizares.

En la entrega de los Premios Integra BBVA, Jiménez ha asegurado que tanto el aborto como los abusos sexuales a menores son "asuntos completamente diferentes". La ministra apostilla que "es completamente inadecuado sobre todo en una persona que ocupa la posición como la del arzobispo Cañizares".

Jiménez apunta que "es muy grave que se compare una cosa con la otra" y añade que las agresiones sexuales se comenten "normalmente en menores y contra su voluntad, y afectan de una manera terrible para el resto de su vida".