Archivada la causa contra un presunto maltratador al demostrarse que su pareja se autolesionó
- El hombre pasó 11 meses en prisión preventiva por 8 denuncias por lesiones
- El informe forense concluye que la mujer se causó las lesiones con un cúter
- La presunta víctima pidió protección en varios programas de televisión
El juzgado de Violencia Doméstica ha archivado la causa contra un hombre que pasó 11 meses en la cárcel por ocho denuncias de maltrato que ahora se ha demostrado que no pudo cometer o que fue su compañera quien se autolesionó con un cúter.
El juez ha deducido testimonio por un presunto delito de denuncia o acusación falsa contra la presunta víctima, quien entre 2005 y 2008 presentó ocho denuncias por agresiones.
La mujer además acudió a numerosos programas de televisión en los que, entre lágrimas, aseguró que era madre de dos niños pequeños y que no sabía "cómo pedir protección para los ser la próxima en la lista" de mujeres asesinadas por su pareja.
El abogado de defensor del denunciado, Fernando Retamar, ha lamentado que su cliente haya pasado once meses en prisión preventiva a pesar de que disponía de numerosos testimonios a favor, incluyendo 1.200 firmas de apoyo de sus vecinos de La Rinconada (Sevilla).
El auto emitido por el juzgado de Violencia Doméstica asegura que el denunciado no pudo cometer una parte de las lesiones porque, según demostró a través de testigos, se encontraba fuera de Sevilla.
En el caso de la presuntamente cometida el 8 de marzo de 2007 se encontraba en prisión.
"Falta de verosimilitud"
El juez afirma que no sólo hay dudas en la forma en la que se produjeron los hechos denunciados sino también "en la evidente falta de verosimilitud de la denunciante".
Para ello se basa en el informe forense sobre la agresión cometida supuestamente el 21 de enero de 2008, en el que se especifica que todas las lesiones que tenía la mujer "están todas situadas en la cara anterior del cuerpo, zonas accesibles para la interesada".
Además, las heridas que presentaba en el cuello "son difícilmente producidas en una situación de forcejeo, las del antebrazo y muslo son paralelas, difícilmente producidas en una situación de forcejeo en que dos personas se están moviendo continuamente y mantienen posiciones diferentes".
Por ello, el forense concluía que "no se puede descartar la característica autolesiva de las lesiones descritas", según recoge el auto, que además se refiere a que el acusado estuvo ese día localizado en Umbrete (Sevilla), según certificó la Policía.
El 12 de junio de 2007 R.V.D. presentó otra denuncia contra la madre de su compañero que también concluyó con una sentencia absolutoria en el juzgado de instrucción 13 de Sevilla, añade el juez.
Además, un informe de la Unidad de Valoración Integral del Daño (UVIG), especializada en violencia de género, dio cuenta del "escaso grado de verosimilitud de las denuncias presentadas por la perjudicada" pues su testimonio "tiene poca veracidad, destacando su inconsistencia, las contradicciones y la escasa concreción de su relato".
El afectado ha anunciado que va a presentar a su vez una demanda por los daños y perjuicios causados para que su ex compañera "pague la parte del daño que ha causado", ya que cuando estuvo en la cárcel perdió su trabajo y le ha costado encontrar otro.