El Gobierno se pronunciará sobre el futuro de la central nuclear de Garoña antes del 5 de julio

• Analizará el informe del CSN en el plazo previsto, de un mes
• Zapatero recuerda su compromiso de asumir las promesas electorales
• Asegura que el Gobierno se pronunciará "motivadamente y en tiempo útil"
• Tendrán cuenta criterios como la seguridad y la garantía del suministro
• El PP defiende que la energía nuclear es "compatible" con la renovable

La polémica sobre el posible cierre de la central nuclear de Garoña en la sesión de control en el Senado

El Gobierno se pronunciará sobre el futuro de la central nuclear de Garoña, si se cierra o se prorroga su vida, antes del 5 de julio, tras analizar el informe al respecto del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) y en el plazo de un mes del que dispone el Ejecutivo para hacerlo.

Así lo ha dicho el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su última comparecencia en el Senado antes del fin del periodo de sesiones a preguntas del grupo popular.

Zapatero ha dicho que "procurará mantener" y "cumplir, siempre que sea posible, los compromisos adquiridos con los ciudadanos", en alusión al programa electoral del PSOE que contemplaba el cierre ordenado de las centrales nucleares conforme al cumplimiento de su vida útil -la central de Garoña la acaba en 2011-.

No obstante, ha matizado que defiende que "la democracia es el respeto a los procedimientos", en alusión a que era pertinente que el CSN se pronunciara sobre la solicitud de prórroga de la licencia.

El presidente del Ejecutivo ha explicado que ya se está trabajando en el análisis del informe remitido por el CSN, que abogaba por prorrogar diez años más la licencia de explotación de la central nuclear burgalesa de Santa María de Garoña, hasta 2019, y ha garantizado que el Gobierno se pronunciará "motivadamente en tiempo útil y sin demorar su decisión por ninguna razón ajena".

Zapatero, que ha sido preguntado por el portavoz popular en el Senado, Pío García-Escudero, ha recordado que el programa electoral del PSOE decía que se cerrarían las centrales nucleares si estaba garantizado el suministro a ciudadanos y empresas, por lo que se decidirá el futuro de Garoña "en esos términos".

Valorar seguridad y garantía de suministro

Según el presidente, para valorar el futuro de la central nuclear burgalesa se tendrá en cuenta "ante todo la seguridad", especialmente "tratándose de una de primera generación", ya que Garoña fue construida en los años 60 e inaugurada en 1970, "en el siglo pasado".

También se evaluará el criterio de que quede garantizado el suministro eléctrico a empresas y ciudadanos, "teniendo en cuenta que Garoña aporta un 1,4% del total" y las condiciones impuestas para una eventual renovación

Por último, se seguirá el "criterio general de apoyo a las energías limpias y menos costosas, como alternativa a las nucleares que concluyan su vida útil".

Por su parte, el portavoz del PP en el Senado ha defendido la continuidad de Garoña, en vista al informe favorable del CSN, y se ha mostrado convencido de que la apuesta por la energía nuclear es "compatible" con la de las energías renovables.