Un submarino francés busca ya en 36 km2 las cajas negras del avión de Air France siniestrado
- La delimitación de la zona cambiará cada día, en función de los resultados
- En caso de que las localicen, tres robots la sacarán del fondo marino
- Son ya 41 el número de cadáveres del accidente hallados en el Atlántico
- Comienzan los análisis forenses para identificar a las víctimas
El submarino nuclear francés Emeraude ha llegado ya a las aguas del océano Atlántico donde se encuentra el avión de Air France siniestrado con 228 personas a bordo y ha iniciado la búsqueda de las cajas negras de la aeronave, una tarea que se presume muy complicada dado la profundidad de las aguas y el abrupto fondo marino del lugar.
"El Emeraude comenzará su patrulla durante la mañana en una zona de búsqueda inicial de 36 km2", ha asegurado el capitán del Ejército francés Christophe Prazuck.
Según el programa previsto, cada día realizará un barrido en una zona distinta para tratar de encontrar las cajas negras, que están concebidas para emitir señales durante un periodo de un mes que pueden ser detectadas a una distancia de un kilómetro.
Brasil ha recuperado ya 41 cadáveres de las aguas del océano atlántico, mientras comienzan los análisis forenses para identificar a las víctimas en la ciudad de Recife, hasta donde ya han llegado los primeros 16 cuerpos rescatados.
Si las localizan, los robots las rescatarán
El submarino nuclear Emeraude se puso rumbo a la zona la semana pasada para ayudar a recuperar las cajas negras, que según los investigadores aportarán "importantísima información" para averiguar qué ocurrió para que se precipitase la tragedia.
El Pentágono ha enviado también a las costas de Brasil infraestructura para localizar las cajas negras hasta una profundidad de 6.100 metros, punto máximo para el que están preparadas para aguantar las máquinas.
En caso de que el submarino localice las cajas negras, serán los tres robots franceses desplazados a la zona los encargados de rescatarlas.
A la espera de hallar las cajas negras del Airbus A330-220, cobra fuerza la hipótesis de que el accidente fue causado por un problema en los sensores de la sonda de la aeronave, que podría haber informado erróneamente de la altura a la que se encontraban en el momento del siniestro.