Ahmadineyad insiste en su legitimidad y Teherán acusa a la prensa de "sostener las revueltas"

• El presidente cree que su reelección es la "prueba de la confianza del pueblo en su gobierno"
• Mousaví ha vuelto a reiterar este miércoles la anulación de los comicios presidenciales
• Exteriores acusa a los periodistas extranjeros de ser "portavoces de los amotinados"
• El Ministerio del Interior abre una investigación sobre el asalto de una residencia universitaria
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En Irán, la marea verde vuelve a salir a la calle de forma pacífica

El presidente iraní insiste en la legitimidad de su reelección mientras Teherán acusa a la prensa extranjera de convertirse en "portavoz" de los "amotinados" que piden la repetición de las elecciones presidenciales.

Mahmoud Ahmadineyad ha afirmado este miércoles que su reelección es "la prueba de la confianza del pueblo en su gobierno". El presidente iraní cree que "el resultado confirma el trabajo del noveno gobierno, un trabajo basado en la honorabilidad y el servicio al pueblo". Son declaraciones a la agencia de noticias Isna sobre su primer mandato (2005-2009).

"Las elecciones han sido un hito más para la República Islámica. Un referéndum en el que 40 millones de iraníes han ratificado los fundamentos de la República Islámica. Han sido estos fundamentos los que han sido apoyados con los votos", ha añadido.

La reelección del presidente el pasado viernes 12 de junio, con el 62% de los votos, ha sido puesta en duda por sus tres rivales, principalmente por el ex primer ministro Mousaví, que ha denunciado irregularidades y ha vuelto a pedir este miércoles la repetición de los comicios. Mousaví obtuvo cerca del 33% de los sufragios.

El Consejo de Guardianes ha accedido a realizar un recuento parcial de los votos de las urnas denunciadas por irregularidades, pero ha descartado anular todo el proceso.

Las protestas se han sucedido desde el mismo vienes. Mousaví ha convocado además una jornada de duelo para este jueves en las mezquitas en solidaridad con las familias de los fallecidos en las revueltas. Según explica desde Teherán la enviada especial de TVE, Yolanda Álvarez, el número de muertos asciende a nueve.

Acusaciones contra la prensa

Por su parte, el ministerio iraní de Exteriores ha acusado este miércoles a los medios extranjeros de ser el "portavoz" de los "amotinados" y ha advertido que a estos "enemigos" se les dará "jaque mate", según un comunicado citado por la agencia de prensa Isna.

Este martes, las autoridades retiraron todos los permisos a los periodistas a los que ha prohibido salir a la calle para cubrir las protestas contra Ahmadineyad.

Las autoridades iraníes, que consideran que los periodistas obedecen las órdenes de sus países, ha acusado a "ciertos estados" de "sostener" las "manifestaciones ilegales" contra el poder y de haberse convertido en "portavoces de las revueltas", según la nota.

El ministerio invita a los periodistas a "cambiar su interacción incorrecta con los acontecimientos iraníes". "En el momento oportuno y sin ninguna duda los enemigos de la unidad nacional iraní serán puesto en jaque mate".

Alejarse de las protestas

El Ministerio de Asuntos Exteriores aconseja a los viajeros en Irán "mantenerse alejados de aglomeraciones, manifestaciones y multitudes" y, en caso de "desórdenes callejeros, permanecer en sus domicilios y hoteles y salir lo menos posible".

Tras destacar que Irán es "en líneas generales un país seguro", Exteriores advierte en su página web "contra cualquier exceso de confianza" y recomienda "extremar las precauciones que todo viajero debe observar en cualquier país extranjero", como evitar atuendos llamativos y hace ostentación de objetos de valor o grandes cantidades de dinero.

El Ministerio se hace eco expresamente de las manifestaciones, tanto de protesta como de apoyo al presidente Mahmud Ahmadineyad, que tienen lugar en el país desde la publicación de los resultados de las elecciones presidenciales, "que son puestos en duda por gran parte de la opinión pública".

Investigación en la Universidad de Teherán

El ministro iraní de Interior, Sadegh Mahsuli, ha ordenado que se abra una investigación sobre el asalto ocurrido en la residencia de la Universidad de Teherán el pasado fin de semana.

Según la radio pública de Irán, Mahsuli ha enviado una carta al gobernador de Teherán en la que hace hincapié en la importancia de los estudiantes e intelectuales en la sociedad iraní y solicita que se investiguen los hechos.

El ministro pide "la formación de un equipo de expertos para identificar a los culpables, valorar los daños e indemnizar a los afectados" en la misiva, en la que insiste en la necesidad de satisfacer las demandas de los estudiantes afectados.

Según los estudiantes, al menos cinco de ellos murieron el pasado fin de semana a manos de policías y milicianos islámicos Basij, que irrumpieron en el campus universitario, agredieron a los alumnos y prendieron fuego a los dormitorios.