España llama a consultas a su embajador en Honduras en protesta por la destitución de Zelaya

• Lo ha anunciado el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado
• Se produce en respuesta a la crisis política que vive el país latinoamericano

El Gobierno español ha llamado a consultas a su embajador en Honduras, tras la crisis política que atraviesa el país después de la destitución de Manuel Zelaya como presidente hondureño, según un comuniado del Ministerio de Asuntos Exteriores, dirigido por Miguel Ángel Moratinos, quien ya anunció esta decisión en señal de "protesta".

Moratinos sostuvo este martes que propondría a la UE la llamada a consultas de sus respectivos embajadores en Tegucigalpa en señal de protesta por la "ruptura del orden constitucional" en Honduras, después de que Zelaya fuera secuestrado por el Ejército y enviado a Costa Rica.

Según el comunicado de Exteriores, España ha tomado esta decisión con la "esperanza de que ello contribuya, en el marco de los esfuerzos internacionales en curso, al restablecimiento de la institucionalidad democrática en dicha República hermana centroamericana".

El ministro explicó este martes que este gesto se ha hecho "necesario y  urgente para mostrar la firmeza de la UE" ante "la ruptura del orden  constitucional" en el país centroamericano.

La llamada a consultas es una herramienta diplomática de la que  disponen los Gobiernos para mostrar su fuerte rechazo y malestar ante  alguna actuación del Estado ante el que está acreditado el embajador  al que se llama. Supone una retirada temporal de este representante  hasta que se solucione el incidente.

Moratinos subrayó además que ni España ni seguramente ningún otro  miembro de la comunidad internacional dará legitimidad a las  autoridades "provisionales e inconstitucionales" que han asumido las  riendas de Honduras tras el golpe de Estado que expulsó al "auténtico  presidente constitucional", Manuel Zelaya. 

Esta noticia se conoce el mismo día en el que el secretario general de la Organización de Estados Americanos ha dado un ultimátum de 72 horas al presidente hondureño elegido por el Parlamento el pasado domingo, Roberto Micheletti, para que restituya en la presidencia. De no producirse, expulsará a Honduras del organismo.