La Policía disuelve con gases y disparos la primera manifestación tras la confirmación de Ahmadineyad
- Unos 3.000 manifestantes conmemoran la revuelta estudiantil de 1999
- Gritaban "muerte al dictador" e instaban a la policía a "apoyarlos", según testigos
- Se trata de otra protesta contra la polémica reelección del presidente ultraconservador
- Irán atraviesa la mayor crisis política desde la Revolución Islámica de 1979
Unas 3.000 personas se han manifestado junto a la Universidad de Teherán para conmemorar el décimo aniversario de la revuelta estudiantil, de 9 de julio de 1999, que supuso la primera gran sacudida al régimen nacido de la Revolución Islámica (1979).
Se trata de otra muestra de rechazo al Gobierno, a lo que la Policía ha respondido con gases lacrimógenos y tiros al aire, según testigos.
Pero además es la primera manifestación contraria al Gobierno tras la confirmación como presidente de Mahmoud Ahmadineyad el pasado 29 de junio.
Las elecciones del 12 de junio dieron dieron la victoria al presidente ultraconservador, lo que ha desatado la mayor crisis política en el país desde la Revolución Islámica de 1979.
Detienen a algunos pro reformistas
"La policía ha recurrido a los gases lacrimógenos para dispersar" a la gente, ha afirmado un testigo, quien ha precisado que entre 200 y 300 manifestantes, reunidos en la avenida Kargar, cerca de la plaza Enghelab (revolución), gritaban "muerte al dictador" e instaban a la policía a "apoyarlos". Asimismo, algunos testigos han confesado a Reuters que la Policía está
deteniendo "Centenares de personas que vienen de varios puntos convergen hacia la universidad", ha declarado otro testigo. "Policías y agentes vestidos de civil se ubicaron en la avenida Enghelab, delante de la universidad, y alrededor de la plaza".
Estos últimos días, se repartieron panfletos en Teherán para llamar a los habitantes a la manifestación a pesar de que el Gobierno la había prohibido.
500 arrestados tras las protestas
Irán juzgará a unas 500 personas arrestadas durante las protestas ocurridas tras las elecciones presidenciales del pasado 12 de junio, en las que resultó reelegido el presidente Mahmud Ahmadineyad.
"La Fiscalía General ha aceptado los casos de medio millar de detenidos que aún se encuentran en prisión", ha explicado el diputado Mohamad Reza Tabesh, quien este miércoles se ha reunido con el Fiscal General del Estado, Qorban Ali Dorri Najafabadi.
El parlamentario ha detallado que "los casos serán trasladados a los juzgados preceptivos". Después, algunos podrían pasar a disposición del Consejo Supremo de Seguridad Nacional.