Trabajadores del Gregorio Marañón exigen la dimisión del gerente
- Los manifestantes cargan contra el gerente por acusar a la enfermera
- Además de pedir la dimisión, han denunciado falta de personal y mala gestión del centro
- La enfermera se encuentra internada en un psiquiátrico para afrontar la tragedia
- El Sindicato de Enfermería, SATSE, denuncia al gerente ante la Fiscalía General del Estado
Trabajadores del Hospital Gregorio Marañón de Madrid se han concentrado a las puertas del centro sanitario para pedir la dimisión del gerente del centro, Antonio Barba, por acusar a una enfermera de haber causado la muerte del bebé Rayan.
Además de pedir la dimisión del gerente han apoyado a la enfermera de la unidad de neonatos que alimentó por vía intravenosa a Rayan y han denunciado la mala gestión del hospital, así como la falta de personal.
El comité sostiene en un comunicado que "este incidente se enmarca dentro de una mala organización y planificación donde diariamente los profesionales del centro sufren una presión asistencial continua, sometidos a una insuficiencia de plantilla y movilizaciones forzosas arbitrarias" y además, aseguran que todos estos hechos son conocidos por el gerente "por reiteradas denuncias del comité de empresa y de los trabajadores".
Los manifestantes han confirmado que la enfermera se encuentra internada en un hospital psiquiátrico privado para afrontar la tragedia. Las mismas fuentes subrayan que no se puede criminalizar a la joven por la mala organización interna del centro.
SATSE denuncia al gerente del hospital
El Sindicato de Enfermería (SATSE) ha presentado una denuncia ante el Fiscal General del Estado contra el gerente del Gregorio Marañón, Antonio Barba, por las acusaciones vertidas contra la enfermera presuntamente implicada en la muerte de Rayan, sin que se hubiera producido una investigación previa.
Según SATSE, Barba ha vulnerado la presunción de inocencia al calificar el hecho de "negligencia profesional gravísima, sin duda, ni excusa".
A juicio del sindicato, realizar acusaciones tan graves sin que se hubiera producido una investigación puede ser constitutivo de un presunto delito de injuria.
Solicita al Fiscal General del Estado que dicte las órdenes e instrucciones oportunas para depurar cualquier eventual responsabilidad penal en que haya podido incurrir el gerente.