Arias tiene nueva propuesta pero Zelaya da por fracasado el diálogo

•  La Fiscalía le pide a Zelaya que se presente ante las autoridades
• Arias propone un Gobierno de unidad y reconciliación nacional
• Continúan las protestas de seguidores de Zelaya y Micheletti

El presidente de Costa Rica, Óscar Arias, ha presentado una nueva propuesta para salvar la mediación en la crisis política de Honduras, que parece no tener mucho futuro porque los representantes del depuesto mandatario Manuel Zelaya ya dieron el proceso por "fracasado".

El "Acuerdo de San José" presentado por Arias establece, siempre como punto principal, el regreso de Zelaya al poder el próximo viernes y la conformación de un Gobierno de reconciliación nacional.

El mandatario costarricense aseguró que cumplió con su "trabajo", y aunque se mostró abierto a escuchar nuevas ideas, afirmó que la alternativa a su propuesta es que las partes acudan a otros foros internacionales, como la Organización de Estados Americanos (OEA).

Rixi Moncada, ex ministra de Energía de Zelaya y líder de su delegación en San José, ha subrayado que este grupo ya había aceptado la propuesta original que Arias presentó el pasado sábado y que fue rechazada por la comisión del presidente en ejercicio de Honduras, Roberto Micheletti.

Ante esta situación, declaró Moncada a la prensa, "el proceso de San José ha fracasado por la intransigencia del gobierno golpista".

La propuesta original de Arias tenía como eje central el retorno de Zelaya al poder, a la cabeza de un gobierno con ministros afines a Micheletti en puestos clave, pero fue rechazada de plano por este grupo, que se opone al regreso del gobernante depuesto a la Presidencia.

La representante de Zelaya recordó que el mandato de la comunidad internacional ha sido la restitución incondicional del gobernante en la Presidencia de Honduras, e instó a Arias, como presidente pro tempore del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), a convocar una cumbre extraordinaria con los mandatarios de la región.

Además, señaló que el tema de Honduras debe volver al seno de la Organización de Estados Americanos (OEA) y, de ser necesario, elevarse al conocimiento del Consejo de Seguridad de la ONU.

Por su parte, Mauricio Villeda, representante de Micheletti, se limitó a agradecer los oficios de Arias como mediador y a asegurar que presentará "hoy mismo" la nueva propuesta a los poderes de Estado de su país. "Esperamos tener una respuesta pronto y no poner una lápida" a la mediación, dijo.

Reclamado por la justicia

La Fiscalía General de Honduras señala que "lo más correcto" sería que el depuesto presidente Manuel Zelaya se presentara ante las autoridades del país, donde afronta acusaciones por delitos políticos.

"Lo más correcto es que se presente y ahí nosotros (...) le vamos a demostrar la plena prueba que nosotros tenemos de su acción delictiva", declaró a los periodistas el fiscal general hondureño, Luis Rubí.

El presidente depuesto afronta acusaciones por traición a la patria, abuso de autoridad, usurpación de funciones y delitos relacionados con una consulta sobre la convocatoria de una Asamblea Constituyente, declarada ilegal por la Justicia y el Parlamento, y programada para el 28 de junio, día en el que fue derrocado.

Rubí también ha indicado que la Fiscalía se opone a cualquier acuerdo que implique una posible amnistía para Zelaya, al explicar que esa medida "vendría a ser un acto contrario a la ley interna".

Más protestas

Tegucigalpa ha vuelto a ser escenario de protestas a favor y en contra del mandatario depuesto Manuel Zelaya, mientras la comisión del nuevo Gobierno viajó a Costa Rica en busca de reanudar el diálogo sobre la crisis.

Miles de simpatizantes del Gobierno de Roberto Micheletti salieron a las calles en la denominada marcha "Por el patriotismo y el valor", convocada por la organización opositora a Zelaya, Unión Cívica Democrática (UCD).

La movilización fue convocada "en apoyo a la democracia" y para expresar su rechazo al retorno de Zelaya y a la "injerencia" del gobernante venezolano, Hugo Chávez, según sus organizadores.

Honduras vive una profunda crisis política desde el pasado 28 de junio, cuando Zelaya fue derrocado en un golpe de Estado y expulsado del país, y el Congreso decidió nombrar a Micheletti en su lugar, a pesar de no contar con el reconocimiento ni aprobación de la comunidad internacional.