Rusia moviliza sus barcos para buscar a un buque desaparecido en el Atlántico
- El Arctic Sea, con 15 tripulantes rusos, habría sido atacado en aguas suecas
- La última comunicación recibida fue el 25 de julio en el estrecho de Dover
- Las autoridades británicas sospechan que podría haber sido secuestrado
- Tenía que llegar el 4 de agosto a un puerto argelino con madera finlandesa
Barcos de guerra rusos se han unido a la búsqueda internacional de un carguero de 4.000 toneladas que misteriosamente desapareció en las costas de Francia hace dos semanas, lo que alimenta las especuliaciones de que fue asaltado por piratas.
El Arctic Sea, un buque de carga de bandera maltesa con 15 rusos en su tripulación, no llegó al puerto argelino de Bejaia el pasado 4 de agosto, tal y como estaba planeado. La última comunicación recibida fue el pasado 28 de julio, a la altura del Canal de La Mancha.
"Por orden del presidente Dmitri Medvedev todos los barcos de la marina rusa en el Atlántico han sido enviados para unirse a la búsqueda del Arctic Sea", ha asegurado el comandante de la Marina rusa, el admitante Vladimir Vysotsky, en declaraciones a la agencia rusa Itar-Tass.
Un barco ruso, el Ladny, ha pasado ya el estrecho de Gibraltar para unirse a la búsqueda, que es apoyada por el satélite de seguimiento de la costa de África Occidental.
Además, hasta otros cuatro barcos rusos de la flota del Mar Negro, incluyendo dos submarinos nucleares, forman parte del disposivo de búsqueda del carguero que oficialmente llevaba madera finlandesa valorada en más de un millón de euros a Argelia.
Ataque en Suecia
Según la agencia de marina y guardacostas británica, el último contacto por radio del barco se produjo el 28 de julio, antes de entrar en el estrecho de Dover, entre Francia y Reino Unido.
La autoridad marítima maltesa asegura que ha recibido informes de que el barco fue abordado por hombres que se hicieron pasar por policías en aguas suecas el pasado 25 de julio, cuatro días antes de que entrase en el estrecho de Dover.
El barco habría sido abordado por "entre ocho y doce personas supuestamente enmascaradas que llevaban uniformes con la palabra 'Policía' y estaban armados con pistolas y rifles", ha detallado la autoridad marítima maltesa.
"Durante su estancia a bordo, los miembros de la tripulación fueron asaltados, atados, amordazados y cegados y algunos de ellos resultaron heridos de gravedad", ha denunciado.
Posible cargamento de drogas
Al parecer, los supuestos policías sometieron a la tripulación a un duro interrogatorio sobre tráfico de drogas, pese a que las autoridades suecas han subrayado a Malta que ninguna de sus agencias policiales están implicadas en el incidente.
En este sentido, mijaíl Voitenko, editor del boletín marítimo ruso Sovfracht, ha asegurado en declaraciones al Daily Telegraph que podía haber sido atacado en el Báltico porque llevaba "un cargamento secreto", en concreto armas o drogas.
Y es que, tras salir del puerto finlandés de Pietarsaari, el barco fue reparado en Kaliningrado, un enclave ruso conocido por el contrabando.
Lo cierto es que doce horas después del ataque, los supuestos piratas se marcharon del barco, que siguió su rumbo con normalidad.
Otras hipótesis
Sin embargo, tras pasar por el estrecho de Dover, el dispositivo electrónico que emite la señal de respuesta con su posición parece que fue apagado y solo se tiene comprobación visual de su presencia el pasado 30 de julio en la costa de Brest, al norte de Francia, aunque posteriormente parace que fue divisado en Portugal.
Según el Consejo Internacional Marino (IMB, en inglés) ha asegurado que no tenían detalles sobre la situación del barco, pero eso no significa necesariamente que haya sido atacado por piratas.
"El velero podría haber sido desviado ilegalmente, podría haber sido atacado por los piratas y los piratas estarían llevándolo a otro destino o podría ser usado como un barco fantasma, con la identidad cambiada", ha declarado un portavoz del IMB a Reuters.
"Si hubiese sido pirateado, entonces el supuesto pirata busca un rescate. Sólo tenemos que esperar y ver si hay una petición de rescate", ha añadido.
Otros expertos marítimos ponene en duda que el barco haya sido atacado y suponen que solamente ha pasado desapercibido, algo raro pero no completamente extraordinario.
En la misma línea, Jeremy Harrison, director de comunicaciones de la cámara naval británica ha tildado el posible ataque pirata de "especulación". "¿Por qué atacarían y tomarían un barco mediano que transporta madera?".