El Gobierno escocés libera al único condenado por el atentado de Lockerbie
- Le dejan libre por motivos humanitarios ya que sufre un cáncer terminal
- Ha cumplido ocho años de cárcel de los 27 mínimos establecidos
- Fue condenado a cadena perpetura por el atentado en Lockerbie en 1988
- El vuelo de la compañía estadounidense PanAm estalló con 270 personas
- Obama "lamenta profundamente" la excarcelación del terrorista
El Gobierno escocés ha liberado por motivos humanitarios del terrorista Abdelbaset Ali al-Megrahi, condenado en 2001 a cadena perpetua por el atentado contra un avión de Pan Am en Lockerbie (Escocia), el más sangriento en la historia del Reino Unido, en el que murieron 270 personas.
En un comunicado emitido tras su excarcelación, el ya ex recluso se ha declarado "muy aliviado" por su liberación, ha reiterado su inocencia y ha manifestado su "sincera compasión" por la "pérdida inimaginable" que han sufrido las familias de las víctimas de la masacre.
Aproximadamente una hora después del anuncio de la liberación del terrorista libio, un aparato de la compañía Afriqiyah aterrizaba en Glasgow para recoger a Al Megrahi, que ha subido al avión por su propio pie, ayudado de un bastón, y ha abandonado el Reino Unido rumbo a su país.
Según informó la cadena pública británica BBC, Al Megrahi -de 57 años y víctima de un cáncer terminal- ha llegado a Trípoli a las 20.30 horas en un avión del aerolínea libia Afriqiyah. De acuerdo con la cadena privada Sky News, el excarcelado ha sido recibido en el aeropuerto por "miles de personas" que ondeaban banderas libias y escocesas
El ministro de Justicia de Escocia, Kerry MacAskill, ya había indicado que Al Megrahi, de 57 años y víctima de un cáncer terminal, sería trasladado a Libia, una decisión que supone un desafío a los llamamientos hechos por EE.UU. para que continuara en la cárcel.
MacAskill se responsabilizó totalmente de su decisión, que justificó por el criterio del sistema judicial escocés, según el cual "la Justicia debe ser servida, pero hay que mostrar compasión" en casos como éste, ya que al terrorista libio sólo le quedan tres meses de vida, según los últimos informes médicos.
"La Justicia le llegará ahora de un poder más alto que nadie ni ninguna jurisdicción puede revocar... Va a morir", sentenció MacAskill, quien agregó que, pese a que el terrorista "no mostró ninguna compasión por sus víctimas", esa "no es razón suficiente" para negarle misericordia a él y a su familia.
Único condenado por la explosíon
Al Megrahi es el único condenado por la explosión ocurrida en diciembre de 1988 de un Boeing 747 que se dirigía a EE.UU. cuando sobrevolaba la localidad escocesa de Lockerbie, atentado en el que murieron los 259 ocupantes del aparato, 189 de ellos estadounidenses, y 11 vecinos del municipio.
Entre los familiares de las víctimas del atentado hay división de opiniones, ya que son muchos los que consideran que Al Megrahi fue utilizado por el régimen de Gadafi como un mero "chivo expiatorio".
La esposa de Al Megrahi aseguró, en declaraciones que publica el periódico The Times, que su marido se sacrificó "por toda la nación (libia)" y subrayó que nadie puede compensarle por la ausencia de su esposo ni por la tristeza que le provocó su condena.
Intereses petroleros en Libia
La decisión adoptada por el Gobierno escocés ha sorprendido al Reino Unido, dada la gravedad del atentado y la excepcionalidad de la medida.
La prensa británica ha especulado en los últimos días sobre una posible vinculación entre la excarcelación del terrorista y los intereses petroleros del Reino Unido en Libia.
Tres importantes empresas británicas -BP, Shell y BG- han firmado acuerdos para desarrollar proyectos en Libia relacionados con la explotación de gas y petróleo en la región durante los últimos años.
El príncipe Andrés, duque de York, ha realizado cuatro visitas a Libia en los últimos dos años para entrevistarse con el líder libio, Muamar el Gadafi, y su hijo.
El ministro británico de Empresa, Peter Mandelson, también coincidió con el vástago del dirigente libio durante sus vacaciones de este verano en la isla griega de Corfú.
La implicación de Libia en el atentado de Lockerbie quedó probada en las investigaciones llevadas a cabo por Scotland Yard y las estadounidenses FBI y CIA y dio lugar a una serie de sanciones económicas al régimen de Gadafi, que finalmente tuvo que ceder y entregar a dos de sus agentes para que fueran juzgados.
El levantamiento de las sanciones, entre ellas las de Naciones Unidas, no llegó hasta 2003, cuando Gadafi aceptó que su país era responsable subsidiario del atentado y pagó 2.700 millones de dólares en concepto de indemnización.
EE.UU. no está conforme
El presidente de EEUU, Barack Obama, ha lamentado "profundamente" la decisión tomada por el Ejecutivo escocés de excarcelar al único condenado por el atentado de Lockerbie.
Antes, el Gobierno estadounidense ya había hecho público su rechazo a la excarcelación del terrorista por boca de su secretaria de Estado, Hillary Clinton, quien declaró el miércoles: "Exhortamos a las autoridades escocesas a que no adopten esa decisión y esperamos que no la tomen".
Poco antes del anuncio oficial, un avión partió de la capital de Libia, Trípoli, con rumbo a Glasgow (Escocia) para trasladar a Al Megrahi, quien ha cumplido sólo 8 años de cárcel del mínimo de 27 que implicaba su condena.