Los viticultores piden a la Administración la repatriación de los rumanos fallecidos
- Los productores piden que la Administración sufrague los gastos de repatriación a Rumanía
- Seis vendimiadores fallecieron en un accidente de tráfico en Buñol, en Valencia
Los viticultores de Valdepeñas (Ciudad Real) que tenían previsto contratar a los seis rumanos que ayer murieron en un accidente de tráfico en Buñol (Valencia) se han movilizado para que las administraciones ayuden a sus familias a sufragar la repatriación de los cadáveres.
Así lo ha explicado Francisco Delgado, uno de los agricultores que iba a contratar a parte de los fallecidos y que ha detallado que los infortunados, cinco hombres y una mujer, se dirigían a Valdepeñas para trabajar en la vendimia cuando sufrieron el trágico accidente en la autovía A-3, donde un camión arrolló a la furgoneta en la que viajaban cuando se encontraba estacionada en el arcén por causas que se desconocen.
Delgado ha agregado que conoce al hermano de una de las víctimas mortales al que ayer le tuvo que dar dinero para que pudiera trasladarse a Valencia, donde se encuentran los restos mortales de los fallecidos, cuya repatriación -según le ha manifestado éste- costará en torno a los 7.000 euros por cadáver.
Ante los imposibilidad de que los familiares sufraguen el traslado de los cuerpos a su país, Delgado ha hecho un llamamiento a las autoridades para que ayuden a financiar los costes de la repatriación de los cadáveres.