Una ONG israelí denuncia que más de la mitad de los muertos en la guerra de Gaza fueron civiles
- Según la organización B'Tselem, 773 de los 1.387 muertos no pertenecían a Hamás
- De ellos, casi la mitad eran menores de 18 años
- Pide al gobierno israelí una nueva investigación sobre las víctimas de la operación
- Israel dice que el grupo no tiene medios suficientes para hacer un cálculo de este tipo
Un grupo israelí pro derechos humanos ha denunciado este miércoles que más de la mitad de los palestinos fallecidos en la guerra de Gaza fueron civiles inocentes y no milicianos, al contrario de lo que el gobierno de Israel viene defendiendo hasta este momento.
En concreto, la organización B'Tselem recoge en su informe que durante el conflicto -desatado entre diciembre de 2008 y enero de 2009- murieron en total 1.387 personas, de los que 773 fueron civiles, frente a los 330 milicianos, 248 policías y 36 personas que han sido incapaces de clasificar como combatientes o civiles.
Entre las víctimas civiles, 320 eran menores de 18 años.
Hasta ahora, el gobierno isaelí ha reconocido la muerte de 1.166 palestinos, de los que 709 serían combatientes, 295 civiles y 162 personas sin identificar.
Para conseguir estos datos -en la línea de los ya publicados por Amnistía Internacional y el Centro Palestino de Derechos Humanos- la organización israelí ha visitado Gaza para recoger testimonios de testigos y recoger documentos que prueben sus cifras sobre víctimas mortales.
Reflexión de la sociedad israelí
"El extremadamente duro número de víctimas civiles y el daño enorme a las propiedades civiles requiere una seria reflexión por parte de la sociedad israelí", asegura B'Tselem en un comunicado, en el que pide a Israel que inicie una investigación independiente.
Israel lanzó una ofensiva por el lanzamiento de misiles por parte de Hamás a su territorio que duró 22 días y que fue duramente criticada por la comunidad internacional.
Sin embargo, aunque la ONU ha pedido una investigación por el uso de materiales como fósforo blanco en la ofensiva -prohibido por la Convención de Ginebra- y Amnistía ha acusado a Israel de crímenes de guerra, Israel siempre ha defendido que actuó conforme a las leyes internacionales y que trató de minimizar las víctimas civiles.
En este sentido, la teniente coronel Avital Leibovich, portavoz del ejército israelí, ha denunciado que B'Tselem no tiene "ni las herramientas ni las aptitudes necesarias" para dar una imagen completa de las víctimas de la operación, denominada Plomo Fundido.
"Somos una gran organización, tenemos un gran cupero de inteligencia y hemos realizado una completa investigación que demuestra que más de la mitad de las víctimas eran milicianos de Hamás", ha recalcado.