Los policías proponen zonas acotadas para los jóvenes para evitar el botellón

• El Sindicato Unificado de Policía propone que se repartan bebidas sin alcohol
• El SUP advierte que el botellón se produce porque salir de fiesta es muy caro
• Ha criticado la "falta de reacción" del Gobierno en los incidentes de Pozuelo
• Aboga la rebaja de la edad penal para reeducar a los menores delincuentes

El Sindicato Unificado de Policía (SUP) se ha mostrado contrario a prohibir el "botellón" aunque sí ha abogado por articular medidas para combatir el consumo de alcohol entre los jóvenes, acotando zonas de acceso controlado en los que se reparta gratis bebidas "sin" y se impida la entrada de bebidas alcohólicas.

Durante una reunión celebrada el jueves con los responsables de Interior del PP y a la que han asistido el resto de sindicatos policiales, los representantes del SUP han recordado que este fenómeno es fruto de los altos precios de las consumiciones en los locales de ocio de los jóvenes.

"Falta de reacción" del Gobierno

Tras el encuentro, el portavoz de Interior del PP, Ignacio Cosidó, ha denunciado la "falta de reacción" del Gobierno tras las agresiones sufridas por la Policía durante los incidentes del pasado sábado en Pozuelo de Alarcón y ha criticado que el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, "permanezca callado".

"No es posible que mientras se intenta asaltar una comisaría, se incendian coches policiales o se hiere a una decena de policías el ministro del Interior permanezca callado", ha lamentado Cosidó en una nota.

Por otro lado, el sindicato mayoritario en el Cuerpo Nacional de Policía se ha mostrado favorable a una futura rebaja de la edad penal del menor, ya que la impunidad de los menores "es una incitación al delito" y al uso de más jóvenes por parte de otros mayores.

No obstante, el SUP ha aclarado en un comunicado que una futura rebaja de la edad penal no significa que los menores de 13 años deban ingresar en prisión, sino que apuesta por crear centros adecuados para resocializar y reeducar a los menores delincuentes, dotados con los medios materiales y humanos que sean necesarios.