Zapatero reclama garantías para las empresas españolas en Bolivia tras condonarle la deuda

• España ha condonado la última parte de la deuda bilateral con el país andino
• Zapatero dice que "humildemente" España contribuye al desarrollo de Bolivia
• Demanda un marco legal que ofrezca seguridad a las empresas españolas
• Morales dice que las relaciones ahora son buenas y agradece el trato recibido

Morales y Zapatero, en La Moncloa.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha asegurado este martes que la condonación de la deuda a Bolivia y la ayuda oficial al desarrollo que España destina al país andino se hacen "sin pedir nada a cambio", aunque sí ha aprovechado para reclamar "seguridad" y "garantías" para las empresas españoles presentes en territorio boliviano.

Zapatero y el presidente boliviano, Evo Morales, han firmado el acuerdo por el que España condona la última partida de deuda bilateral que Bolivia había contraido y que asciende a 77 millones de dólares y 5,5 millones de euros.

El presidente del Gobierno ha resaltado que España es "el primer donante bilateral" y que para este año están previstos 70 millones de euros.

"Humildemente, sin pedir nada a cambio, porque así entiende el Gobierno la ayuda al desarrollo, estamos contribuyendo al desarrollo y el progreso de Bolivia", ha aseverado.

 

Garantías jurídicas

Por su parte, Morales ha subrayado que ahora, y a diferencia de lo que ocurría antes de su llegada a la presidencia, las compañías confían en el Gobierno boliviano y, a modo de ejemplo, ha destacado las buenas relaciones que mantiene con la petrolera Repsol que, según ha detallado, se ha mostrado dispuesta a acelerar las inversiones en su país.

En una rueda de prensa conjunta, después de que ambos mandatarios mantuvieran un encuentro en La Moncloa, Rodríguez Zapatero ha expresado su confianza en que las relaciones económicas y con las empresas españolas que están en Bolivia "discurran a través del principio de la seguridad y de un marco legal que ofrezca garantías".

"Las empresas españolas están también para contribuir al desarrollo de Bolivia", ha recordado Rodríguez Zapatero.

Nuevas relaciones

Por su parte, el presidente boliviano, Evo Morales, ha reconocido que "nunca" se había imaginado que un día cenaría en el Palacio Real de Madrid, antiguo "centro de decisiones para la invasión (ahora) un centro para recibir al invadido" de América Latina, como lo hizo anoche con motivo de su primera visita oficial a España.

Para el presidente boliviano, esto ilustra "las nuevas relaciones" existentes entre España y Bolivia y que "los tiempos cambian". Por ello, según él, hay que "revisar la historia y evaluar la situación actual", pero "siempre" con el objetivo de generar una mayor confianza entre ambos pueblos en el futuro.

En cuanto a la situación de los inmigrantes bolivianos en España, Morales se ha mostrado menos beligerante que en sus anteriores intervenciones, en las que criticó que se hable de ilegales.

En este sentido, el presidente boliviano ha calificado de "paso importante" el acuerdo suscrito entre España y Bolivia para que los ciudadanos de sus respectivos países puedan votar en las elecciones municipales del otro, puesto que "da un derecho" a los bolivianos que residen de forma legal en nuestro país.