Dan por ahogados a unos 40 clandestinos tras dos días de búsqueda en el Estrecho

• Este domingo no se han hallado cuerpos de la patera que naufragó junto a Perejil
• Tras la alerta fueron recuperados ocho cadáveres y 11 supervivientes el sábado
• Según su relato, en la embarcación viajaban hasta 60 personas
• Marruecos se ha hecho cargo de la investigación y la custodia de los rescatados
• La búsqueda se amplía por las corrientes pero no hay esperanzas de encontrar vivo

Amplían a Ceuta la búsqueda de unos 30 clandestinos desparecidos en el Estrecho

La segunda jornada de búsqueda de los inmigrantes desaparecidos el sábado cerca del islote Perejil al hundirse una patera se ha cerrado esta noche sin que se haya encontrado ningún náufrago y sin esperanzas de hallar supervivientes, mientras que Marruecos se ha hecho cargo de la investigación del suceso.

Una jornada en la que también han sido dados de alta los últimos supervivientes que permanecían ingresados, tres mujeres que pasaron la noche en el hospital de Tánger con síntomas de hipotermia y cansancio. Tanto ellas como los otros ocho supervivientes localizados el día del naufragio han pasado a disposición policial.

Fueron sus testimonios los que alertaron de la desaparición de unas 40 personas, dado que en la embarcación viajaban alrededor de 60 y, por el momento, sólo se han recuperado ocho cadáveres.

En la búsqueda de los náufragos han participado a lo largo de todo el domingo equipos de Salvamento Marítimo, Guardia Civil, la Armada y la Cruz Roja Española, así como la Armada marroquí. No obstante, las labores de localización han sido aplazadas a última hora de la tarde debido a la falta de luz sin que se hayan encontrado más víctimas.

La búsqueda se ha ampliado desde las inmediaciones del islote a las costas de Marruecos y Ceuta, próximas al lugar del suceso. Esta extensión se debe a las fuertes corrientes que existen en el Estrecho de Gibraltar como consecuencia de la confluencia de dos mares, que podrían hacer que los cuerpos aparecieran lejos del lugar del naufragio.

Los equipos de rastreo han destacado la imposibilidad de encontrar inmigrantes con vida, aunque proseguirán la búsqueda el lunes con las primeras luces del día.

Investigación

Las primeras hipótesis del siniestro apuntan al elevado número de personas que iban en la embarcación o al choque con un barco, aunque no se descartan otras teorías.

Al rastreo se ha incorporado este domingo la patrullera P-114 de la Armada española, junto a los efectivos de Salvamento Marítimo y de la Guardia Civil que ya trabajaron el sábado y que localizaron a los ocho cadáveres, siete de ellos de mujeres (algunas embarazadas), cuyas edades oscilan entre los 18 y los 27 años, y que han sido conducidos al tanatorio municipal de Tánger.

 El forense ha comenzado a identificar a las víctimas con pruebas de ADN y otro tipo de reconocimiento -como fotos de posibles tatuajes o marcas corporales- antes de realizar las autopsias.

El naufragio de esta embarcación ha sido uno de los más dramáticos ocurridos este año. Las autoridades han registrado hasta ahora una treintena de fallecidos en aguas andaluzas en el 2009, aunque muchos más pueden haber muerto sin que haya constancia.

El año pasado 3.017 migrantes llegaron en patera a las costas andaluzas y este año van más de 2.500.

Rescatan a 10 magrebíes en otras dos barcas

Además, la Guardia Civil ha interceptado dos lanchas inflables de juguete con seis y cuatro inmigrantes marroquíes, respectivamente, cerca de las costas de Tarifa (Cádiz). Todos se encuentran en buen estado de salud.

Los agentes alertaron a los servicios de Emergencia a las 02:50 horas de que había interceptado dos barcas a cinco millas -9,26 kilómetros-, una al sur y otra al sureste de Tarifa.