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Italia despide entre aplausos a los seis soldados muertos en Afganistán

  • Napolitano, Berlusconi y demás autoridades militares y civiles, han asistido a la ceremonia
  • A las 10:00 horas no quedaba sitio para nadie en la basílica de San Pablo Extramuros
  • El ayuntamiento de Roma ha colgado 2.500 banderas para homenajear a los militares
  • Los seis soldados fallecieron en un atentado suicida en Afganistán

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Italia despide entre aplausos a los seis soldados muertos en Afganistán

Es el último saludo de un país a sus soldados. La monumental basílica de San Pablo Extramuros se encuentra repleta para celebrar los funerales de Estado por los seis militares muertos en el atentado suicida contra un vehículo miltar italiano de la OTAN registrado en el centro de Kabul, el pasado jueves.

Varios minutos de aplausos han acompañado la entrada de cada uno de los féretros en la iglesia. Han llegado a San Pablo sobre un camión militar mientras la comitiva fúnebre recorría la distancia entre la capilla ardiente y la basílica a ritmo lento.

El camino ha estado marcado por las 2.500 banderas que el ayuntamiento de Roma ha colgado de todas las farolas. A las 10:00 horas ya no había sitio para nadie en el templo.

Napolitano, Berlusconi, autoridades civiles y militares se han mezclado con los miles de italianos que han querido confortar a las familias en este último adiós.

Y, aunque éstos no son minutos para las discrepancias, a la entrada de la iglesia el líder de la Liga Norte ha proferido una frase categórica: "Los hemos enviado nosotros y ahora están muertos".

Día de luto nacional en Italia

Desde primera hora de la mañana se ha concentrado gente esperando turno para poder participar de la ceremonia. Este lunes,  21 de septiembre de 2009, es día de luto nacional en Italia.

Los cuerpos de los soldados llegaron al aeródromo militar de Ciampino, en Roma, a primera hora del domingo. Los recibió el presidente de la Republica, Giorgo Napolitano. Miles de italianos desfilaron, durante las últimas horas del día, por la capilla ardiente.