'La chica' Merkel consigue domar a la Gran Coalición

• La canciller ha vencido los prejuicios contra ella gobernando con pragmatismo
• Ha evitado el 'lío' político y la confrontación directa con sus adversarios
• Los alemanes verían con simpatía una reedición de la coalición entre los grandes partidos
• Para Merkel lo único malo de estos cuatro años ha sido no poder ir al supermercado

Diferencias entre los dos grandes partidos Alemanes

Ya nadie osaría llamarle la chica de Helmut Kohl, ni mucho menos minusvalorar sus capacidades de liderazgo. 

A pesar de su falta de carisma personal, a pesar de su escaso atractivo físico, a pesar de no ser agresiva ni de gritar "basta", como hacía su antecesor, Gerhard Schröder, Ángela Merkel ha conseguido liderar con inteligencia y sutileza una gran coalición en la que muy pocos creían hace cuatro años y que ha navegado,con acierto,en medio de la peor tempestad financiera mundial.

"Angela Merkel inspira calma, pragmatismo,ese carácter apolítico que es muy apreciado por la gente,ese papel mediador dentro de la gran coalición", sostiene el economista Henrik Enderlein.

La canciller, de hecho, ha intentado estar siempre por encima del lío político, evitando la confrontación directa e inmiscuirse en exceso en las polémicas, dejando el peso de la gestión diaria a sus ministros. 

Buen balance

La gran coalición le ha funcionado razonablemente bien y son muchos los que creen que ella no estaría descontenta con otra ración de lo mismo.

"Creo que Alemania es una democracia consolidada que tolera bien una gran coalición. Además,con la crisis económica y hablando en términos de paz social creo que sería una buena solución", señala el politólogo Jan Techau.

Angela Merkel dice y repite que en los próximos meses lo esencial es estimular el crecimiento económico y que para ello el mejor socio de gobierno sería el partido liberal.

Sin embargo, no cierra ninguna puerta y, a la hora de hacer balance de estos cuatro años de canciller, sólo ve negativa una cosa : no poder hacer la compra con tranquilidad.

"He obtenido mucho más de lo que creo que podría haber perdido. El saldo es positivo, aunque no sería ningun error poder dormir algo más y, bueno, casi todo el mundo me conoce, así que no puedo ir de tiendas o comprar tranquilamente en el supermercado", ha confesado.