Alemania cierra una campaña marcada por el aburrimiento (y gracias)
- El corresponsal de TVE en Berlín hace un repaso de la campaña
- Ha respondido a las preguntas del diario Mallorca Zeitung
- Para García el aburrimiento en sí es una buena señal de la salud democrática alemana
- Aunque la CDU/CSU es la gran favorita, la verdadera triunfadora es Merkel
Termina una campaña electoral en Alemania más bien aburrida, con poco interés, donde todo parece previsible y hasta previsto, aunque los dos principales partidos -CDU/CSU y SPD- han hecho verdaderos esfuerzos por distinguirse en unos programas que se han ido acercando mucho en 4 años de trabajo hombro con hombro.
Sin embargo, en ese "aburrimiento" está precisamente lo más interesante para España porque es una garantía de que ninguno recurre a sacarse conejos de la chistera para tratar de ganar un puñado de votos de ingenuos.
Y es que los políticos aquí se toman las encuestas, las predicciones de votos, y las predicciones de "catástrofes" con una distancia muy saludable.
El 'aburrimiento' como noticia
Por ejemplo, la situación que ha vivido el SPD en los últimos meses hubiera dado como resultado en España un griterío de gallinero que aquí no existe. En cambio, los políticos alemanes no tienen ninguna vocación de payasos de circo y prefieren aburrir a los telespectadores con los mismos monólogos durante meses en lugar de inventarse soluciones mágicas y conjuros milagrosos para solucionar los problemas.
Eso ha provocado que haya tenido que realizar verdaderos esfuerzos en convencer a los editores del interés de la campaña electoral alemana en España, porque no ayuda nada el hecho de que aquí no se hayan montado los circos que suelen acompañar a Sarkozy o Berlusconi.
Curiosamente, a principios de enero, en un Informe Semanal sobre la crisis económica en Alemania esperábamos una bajada de audiencia y nos encontramos con todo lo contrario: los minutos del reportaje sobre Alemania aumentaron la audiencia son respecto a otros reportajes de ese día, algo que hay que atribuir, sin duda, no a la calidad del reportaje sino al interés en España por lo que ocurre en el país más importante de Europa.
Aires de Gran Coalición
Por lo demás, las encuestas coinciden en dan como ganador a CDU/CSU con un 35% de votos, pero en realidad la ganadora será Ángela Merkel. La cuestión será saber si el FDP tendrá ese 14-15% de votos que necesitan para tener juntos una mayoría absoluta y poder mandar al SPD a la oposición.
Esa es la batalla del SPD, ahora, según Frank Walter Steinmeier "con el viento de espaldas": conseguir que Guido Westerwelle no le quite la pareja de baile.
No parece fácil que pueda aspirar a nada más, porque Westerwelle le ha dado calabazas (por lo visto todos lo esperábamos menos él) y los Verdes no parecen la opción alemana para salir de la crisis.
Así las cosas, la reedición de la Gran Coalición es el deseo confesado de Steinmeier, pero también el secreto deseo de Angela Merkel. En 4 años de Gran Coalición ha cimentado su prestigio, apoyándose en dos manos derechas que tenía a su izquierda: el propio Steinmeir y Peer Steinbruck, ministro de Finanzas.
Incluso parece lógico que la Canciller se haya hecho esta reflexión "Cuatro años más de Gran Coalición debilitarán más al SPD y me afianzarán más a mi como canciller".