Enlaces accesibilidad

Micheletti revisará el estado de sitio

Por
Micheletti revisará el estado de sitio a petición del Congreso

El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, ha abierto la puerta, a petición del Parlamento, a la derogación de un decreto que desde este fin de semana mantiene suspendidas varias garantías constitucionales y que amparó la clausura de dos medios de comunicación este lunes.

"Voy a consultar con la Corte Suprema de Justicia, con el Tribunal Supremo Electoral, incluso, si hay posibilidad de hablar con los candidatos presidenciales (...) y así tomar la decisión más conveniente a los intereses de nuestra patria que (...) será derogar ese decreto en el momento más oportuno", ha dicho Micheletti.

"En el término de esta semana estaremos dándole solución a esto", ha añadido tras reunirse con el presidente del Legislativo, José Alfredo Saavedra, y otros diputados que le pidieron derogar el decreto. El presidente golpista ha dicho que aceptaba la propuesta para favorecer el diálogo sobre la crisis política que vive el país.

El decreto, una declaración encubierta del estado de sitio dado a conocer el domingo, debe ser retificado por el Congreso, lo que no tiene garantizado Micheletti. De hecho, en agosto una comisión parlamentaria recomendó la amnistía para el presidente depuesto, Manuel Zelaya, contra el criterio del líder golpista. 

Otros analistas inciden en que este cambio va encaminado simplemente a que el 29 de noviembre se puedan celebrar las elecciones convocadas por el Gobierno de facto y que en principio no serán reconocidas por la comunidad internacional hasta que se deponga a Zelaya. El Gobierno de facto publicó el sábado un decreto por el cual suspende durante 45 días las libertades de circulación y expresión, y prohíbe las reuniones públicas, entre otras medidas, debido a la llamada a la "insurrección" de Zelaya y su entorno.

Amparado por el decreto, el Gobierno de Micheletti ha clausurado este lunes dos medios de comunicación, Radio Globo y Canal 36, y ha impedido marchar a los seguidores de Zelaya en Tegucigalpa y otros puntos del país, en la jornada en que se cumplen tres meses del golpe de Estado.

Zelaya, expulsado del país el 28 de junio, llegó por sorpresa hace una semana a la embajada de Brasil en Tegucigalpa, que sigue rodeada por centenares de policías y militares.

Tras rechazar el domingo la llegada de una avanzada de la OEA, el Gobierno de facto ha invitado este lunes a una comisión de cancilleres de la región y a los funcionarios del organismo panamericano "que deseen acompañarlos" a visitar el país el próximo 7 de octubre.