La venta de Opel a Magna sigue pendiente del acuerdo con Figueruelas

• Sindicatos, Gobierno central y aragonés estudian de nuevo este viernes la oferta
• La discusión se centra en la capacidad de producción de la planta hasta 2013
• Tampoco hay acuerdo con los trabajadores de la sede central, en Ruesselsheim
• La operación está condicionada a que los sindicatos acepten el plan de ahorro

Aunque todo parecía preparado para la firma este jueves de la venta, por parte de General Motors, de la marca de automóviles Opel a la multinacional austríaco-canadiense Magna, el cierre de la operación deberá aplazarse al menos hasta el viernes, dado que dos de las factorías de la compañía se resisten aún al acuerdo: la sede central de Opel en Ruesselsheim y la planta de Figueruelas, en Zaragoza.

El acuerdo con los sindicatos es una condición previa ineludible para que se formalice el traspaso del 55% de las acciones a Magna y su socio financiero, el banco ruso Sberbank, de forma que General Motors retendrá el 35% y el 10% restante irá a manos de los trabajadores.

La noticia no ha sido bien recibida en la planta de Figueruelas en Zaragoza porque Magna no oculta que tiene intención de prescindir de 1.600 trabajadores de esa factoría.

Tras varios meses de negociaciones, el acuerdo parecía cercano e incluso el consejero delegado de General Motors, Fritz Henderson, había declarado que era "bastante posible" la firma del acuerdo de venta a Magna esta misma semana.

Este jueves era el día marcado, pero el acuerdo no ha sido posible, en primer lugar, en la sede central de la compañía en Russelsheim, donde trabajan 15.600 personas y donde los sindicatos mantienen reservas sobre la capacidad de decisión que tendrá la plantilla en la nueva Opel.

Resistencia aragonesa

El otro foco de resistencia se sitúa en Aragón, donde los sindicatos, el Gobierno central y el aragonés llevan dos días estudiando la oferta que Magan planteó el pasado martes, en respuesta al rechazo que suscitó su anterior propuesta.

Este jueves, tras varias horas de reunión, el Gobierno de Aragón ha anunciado en un breve comunicado el encuentro que se celebrará mañana, en la sede de la Consejería de Economía y Hacienda, sin hacer ninguna valoración de la reunión de hoy. A la reunión han sido convocados los sindicatos, que no han participado en la reunión de este jueves.

La anterior oferta de Magna preveía una reducción de la plantilla de en torno a 1.350 trabajadores, 350 menos de los inicialmente previstos, de los 7.500 que trabajan en Figueruelas, donde se ensamblaría el Opel Corsa de cinco puertas. Sin embargo, la planta perdería la producción del Corsa tres puertas -se fabricaría en la planta de Eisenach- y una de sus dos líneas de montaje en 2011.

En cuanto a la última, aunque no se han hecho público los detalles, el ministro de Industria, Miguel Sebastián, señalaba el martes que "garantiza el futuro a largo plazo de Figueruelas, pero no resuelve el ajuste a corto plazo". Es decir, el número de despidos no varía, aunque se aseguraría el mantenimiento de la fábrica entre cinco y diez años.

Aseguraría el futuro de la fábrica de Opel en Figueruelas para un período de entre cinco y diez años, según ha anunciado el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián.

Capacidad de producción

Desde los sindicatos, por su parte, han señalado que el desacuerdo se centra en la capacidad de producción. El presidente del comité de empresa de Opel España, José Juan Arceiz, ha detallado que Magna ha propuesto un plan de cinco puntos "donde lo más destacable es que sumando los modelos Combo, Corsa y Meriva, en España se fabricará el 72% de la plataforma Gamma a partir de 2013". El resto se fabricaría en la fábrica de Eisenach.

Arceiz ha considerado positivo que Magna se haya comprometido a mantener las dos líneas de producción, una trabajando a tres turnos y otra a uno, así como que hayan ofrecido la posibilidad "no confirmada" de fabricar el Combo.

"Ahora falta saber qué vamos a hacer hasta 2013. Magna propone que se fabrique aquí el 70%, lo que supone dos puntos menos que en la actualidad, algo que no nos convence y valoraremos el próximo lunes, 19 de octubre, en una asamblea de la comisión permanente", ha señalado.

En cualquier caso, la falta de acuerdo ha trastocado los planes de General Motors y Magna, que ahora deberán aguardar hasta el viernes e incluso quizá el sábado para cerrar definitivamente la operación.