El hongo asesino de anfibios
Desde hace un par de décadas un hongo está matando a poblaciones enteras de anfibios. Los biólogos están muy preocupados porque se ha extendido por todo el planeta. Lo han apodado 'el hongo asesino' y luchan contra él de la mejor manera que poseen: la investigación. La última que ha conseguido desentrañar algunos de los secretos que pueden dar las claves para acabar con él la publica la revista Science.
Del hongo asesino, llamado Batrachochytrium dendrobatidis, se sabía que ataca a la piel de los anfibios y que los mata, pero poco más. Que atacaba a la queratina una proteína de la piel y que probablemente impedía que los animales pudieran respirar correctamente. Los científicos saben que conocer a tus enemigos es crucial para poder acabar con él. Un equipo australiano ha averiguado que el hongo mata a través de un fallo cardiaco.
Primero descompensa el equilibrio de los iones en la piel y luego se extiende de tal forma que termina desestabilizando el ritmo cardiaco que basa su funcionamiento en unas buenas proporciones de iones positivos y negativos: sin ellas el corazón entra en colapso.
El hongo apareció en Costa Rica en la década de los 80 aunque nadie se percató de su presencia e importancia hasta 10 años más tarde, cuando ya estaba arrasando. Aunque muchos apuntan que todo empezó en los años 30 cuando se exportaban por todo el mundo las ranas africanas de uñas para los test de embarazo.
El hongo asesino está hoy en los cinco continentes, vive en todos los ambientes, hasta en las alturas y en los lugares secos. Se extiende como la polvora: viaja en las plumas de las aves o en el barro de las botas de los montañeros.
Ha acabado con las poblaciones salvajes de la ranita dorada panameña o el sapo dorado de Costa Rica. Tambien amenaza al Sapo Partero de Peñalara de Madrid.
Ciencia al Cubo
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