Dos mujeres mueren en una playa de Tenerife tras el desprendimiento de unas rocas
- Las piedras se han precipitado sobre la playa desde una altura de 40 metros
- Las víctimas estaban en una zona que ya había sufrido un desprendimiento
- Los equipos de rescate han removido la tierra para descartar nuevas víctimas
- Los vecinos se quejan de que no se haya evitado el acceso a la zona acotada
Dos mujeres, una británica y una española, han fallecido tras desprenderse piedras de gran tamaño desde unos 40 metros de altura en la playa de Los Gigantes, al suroeste de Tenerife, el suceso más grave de estas características ocurrido en España en las dos últimas décadas.
En el incidente, que se ha registrado en la playa del Acantilado de Los Gigantes, un enclave turístico del municipio de Santiago del Teide, no se han producido más víctimas, aunque los primeros testimonios apuntaban a que había más afectados por la caída de rocas.
“Los equipos de rescate han removido los escombros para comprobar que no hay más víctimas“
Ello ha motivado que se retirasen los equipos de búsqueda de la Guardia Civil y parte de los grupos de emergencia y rescate que trabajaban en el lugar, que habían procedido a remover de nuevo los escombros ya excavados para tener certeza de que no había más víctimas.
Las mujeres fallecidas son M.A.O., de 57 años y nacionalidad británica, y M.V.A.R., de 34 años y vecina de Arona, al sur de Tenerife.
Los equipos de emergencia se han activado después de que hacia las 15:07 horas se recibieran numerosas llamadas en la Sala del Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad 112 en las que se alertaba del desprendimiento de piedras de grandes dimensiones sobre la playa situada en el acantilado de Los Gigantes.
El tamaño de las piedras ha dificultado las labores de rescate, pues los escombros han alcanzado en algunos tramos los 5 metros de altitud, y ocuparon una superficie de entre 75 y 100 metros cuadrados.
Un socorrista ha advertido de que la zona era peligrosa
En la playa trabaja el socorrista Antonio Plasencia, quien ha afirmado que había advertido previamente a los bañistas de que se trataba de una zona peligrosa, acotada por la Policía Local tras un hecho similar ocurrido el 7 de octubre.
Ese día se produjo un desprendimiento similar que no causó víctimas y la Policía Local instaló balizas en esa parte de la playa, que va a ser cerrada al baño tras el suceso acaecido hoy.
Plasencia ha comentado que había bastante gente en la playa pero no han podido reaccionar ante el desprendimiento de dos grandes piedras y mucha arena, material que forma parte del acantilado de Los Gigantes.
Una parte del acantilado está cubierta de cemento y otra tiene piedras, que es la zona que se ha desprendido.
El alcalde de Santiago del Teide, Juan Damián Gorrín, ha afirmado que hay un proyecto de la Dirección General de Costas para arreglar esta zona de la playa e insistió en que una parte de la playa tenía balizas y advertía del peligro de desprendimiento a los bañistas.
Sin embargo, el dueño de un restaurante anexo ha criticado al Ayuntamiento al considerar que tiene "parte de culpa" por no evitar que la gente se ponga al lado de esta zona peligrosa, y la propietaria de otro establecimiento aseguró que "los vecinos ya advertían de que esto iba a pasar".
Hacia el lugar se han dirigido patrullas de la Guardia Civil de Guía de Isora, Adeje, Playa de las Américas, el equipo de montaña, helicóptero del cuerpo y perros de rescate.
El siniestro ha movilizado un amplio dispositivo de rescate
También han acudido un helicóptero de rescate del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES) del Gobierno de Canarias y otro medicalizado del Servicio de Urgencias Canario (SUC).
Además el Consorcio de Bomberos de Tenerife ha desplazado cuatro bombas pesadas, cuatro vehículos de rescate y dos de mando, mientras que el SUC ha trasladado varias ambulancias, un vehículo de intervención rápida y personal médico.
Entre el personal sanitario se encontraba además el médico y la enfermera del centro de atención primaria de la zona.
Asimismo han colaborado en las labores de rescate policías locales de Santiago del Teide, equipos de perros de Ayuda en Emergencias Anaga, psicólogos de Cruz Roja, equipos de tierra del GES y Salvamento Marítimo.
El peligro de los acantilados
Entre los incidentes de estas características figura uno sucedido también en Canarias, cuando en enero de 2000 una piedra de unos ocho metros de circunferencia cayó en la zona costera de El Banco, en el municipio de Fuencaliente, al sur de la isla de La Palma, sin que causara víctimas.
En septiembre de 1994, un hombre de 32 años, Juan Carlos García Díaz, falleció al ser alcanzado por un desprendimiento de piedras cuando estaba pescando en los acantilados de Tazones, en Asturias.
Un año antes, en mayo de 1993, otro hombre de 56 años, Gerardo Ares Mariño, falleció en Pasajes (Guipúzcoa) al ser alcanzado por un desprendimiento de rocas de grandes dimensiones cuando paseaba por una zona próxima a un acantilado.